El Banco de Desarrollo del Perú (Cofide) ha asignado un total de S/ 16,105 millones en garantías como parte del programa Impulso Myperú, sin embargo, un porcentaje significativo de estos recursos fueron canalizados para otorgar financiamiento a la mediana y gran empresa.
Así, solo la mitad de los S/ 11,604 millones subastados en los primeros cinco meses del 2024 fue asignada a entidades financieras para atender a la micro y pequeña empresa (S/ 5,892 millones), según datos de Cofide.
Pero otros S/ 4,669 millones irían a créditos para la mediana empresa y S/ 1,042 millones a grandes empresas y corporaciones.
LEA TAMBIÉN Se aceleran ganancias de bancos por altibajos del dólar, ¿quién obtiene más?
Este escenario fue advertido por las mypes hace unos meses, al alegar que Impulso no tenía el impacto esperado de catalizar los créditos para la recuperación del sector, y hoy expresan su descontento porque los fondos se están enfocando en empresas de mayor dimensión.
“Nos parece una burla y un insulto que se cree un programa con el nombre de la mype, pero que en realidad sirva para que, de contrabando, se beneficie con recursos del Estado a otras empresas de mayor tamaño”, manifestó a Gestión Susana Saldaña, presidenta del consejo directivo en asociación empresarial Gamarra Perú.
La facilidad con la que se modificó el reglamento para incluir a la mediana empresa es preocupante, pues cambió el objeto de Impulso, dijo. “La implementación de este fondo de garantías para los empresarios de la mype fue un pedido que le costó a este segmento”, expresó.
En setiembre del 2023, el Gobierno dispuso una ampliación del programa en monto total del fondo garantizado y en cuanto a público objetivo, con lo que incorporó a las medianas empresas como potenciales beneficiarios.
La molestia radica en que se utilice al gremio mype para desplegar un programa de garantías que, en realidad, termina favoreciendo más a otros estratos, según la empresaria.
“Es como si esto se convirtiera en un Reactiva Perú. Si la mediana y gran empresa quiere otro programa más de reactivación, que luche en las calles como lo hicimos las mypes”, declaró.
Asimismo, Fernando Calmell, presidente de la Asociación de Emprendedores de Perú (ASEP), cuestionó que el programa se haya implementado sin comprender la complejidad de la micro y pequeña empresa.
“El problema con Impulso Myperú es que se hizo similar a Reactiva Perú; se subastan recursos, la banca los adquiere, priorizan su cartera y lo entregan a sus clientes, pero muchas mypes no recibieron este beneficio porque no cumplían con los requisitos”, criticó.
LEA TAMBIÉN Yape ahora frena a cajeros automáticos y a este otro canal de bancos
¿Cuál es la postura de las entidades financieras?
Según el gerente central de Negocios de Caja Cusco, Walter Rojas, este comportamiento responde a la garantía que tiene cada grupo de negocios para los créditos que solicita.
“La banca tomó más participación en las subastas a nivel de mediana empresa porque estas firmas, además de la cobertura del programa (70% u 80% del préstamo, que asume el Estado), tienen garantías preferidas que dejan a la institución (financiera) con riesgo casi cero”, explicó.
Pero en las mypes no sucede esto, pues hay un porcentaje que se desembolsa sin aval y cuyo riesgo lo asume la microfinanciera que le otorga el crédito, dijo. El financiamiento a la mype se ha ralentizado, mientras que hay un crecimiento en estos préstamos garantizados aunque no a la velocidad que debería darse, acotó.
Además, los recursos para mediana empresa se subastan a tasas de entre 10% y 14%, cuando normalmente los créditos con recursos propios se otorgan a tasas de 8% a 10%, con lo que se genera un diferencial atractivo para la microfinanciera.
“Están colocando con un mayor margen de ganancia, una probabilidad de default cercana a cero y menos provisiones, es más conveniente para la entidad financiera ”, añadió.
Mypes no deberían ser un riesgo
El programa implementado para la mype no está teniendo el impacto previsto en este segmento, pues solo un 10% de los negocios se benefician de los préstamos garantizados por el Estado, estimó Fernando Calmell, de ASEP.
“Se está mirando a los negocios pequeños como si fueran un solo sector económico, pero una empresa manufacturera textil, no es igual a una de metalmecánica, ni a una bodega o comercio de ropa”, complementó.
La presidenta del gremio de empresas de Gamarra, Susana Saldaña, solicitó a las autoridades revisar el enfoque del programa, que nació para reactivar a la mype.
“El sector mype no es un riesgo, el riesgo es usar su nombre para la foto y canalizar fondos a otras empresas como está sucediendo con Impulso Myperú; nosotros no vamos a asumir la responsabilidad de una ayuda que no nos está llgeando”, manifestó.
“Hay entidades (financieras) que están utilizando el programa para limpiar su cartera con problemas bajo el mecanismo de consolidación de deudas; esperamos que luego no digan que las mypes somos las malas pagadoras”, enfatizó.
LEA TAMBIÉN Pensión por consumo: ¿cuánto podría recibir quien se afilie a AFP u ONP?
Economista de la Universidad de Piura. Actualmente se desempeña como redactor de Finanzas en Diario Gestión.
Comienza a destacar en el mundo empresarial recibiendo las noticias más exclusivas del día en tu bandeja Aquí. Si aún no tienes una cuenta, Regístrate gratis y sé parte de nuestra comunidad.