A inicios de esta semana, el ministro de Energía y Minas, Óscar Vera, afirmó en Perumin 36 Convención Minera que el proyecto de cobre Tía María de Southern Perú se concretará si hay entendimiento con las comunidades de Arequipa. Sin embargo, el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, precisó que dicha iniciativa no está en la agenda del Gobierno. En el marco de dicho evento, la compañía minera explicó a Gestión el estado de Tía María y sus otros proyectos, y las actividades de inversión para el 2024.
Raúl Jacob, vicepresidente de Finanzas de Southern Perú Copper Corporation, señaló que la empresa tiene un portafolio de tres proyectos mineros de cobre y uno metalúrgico. En actividades relacionadas a dichas iniciativas y sostenimiento de las minas Cuajone y Toquepala, la empresa invierte el 2023 alrededor de US$ 400 millones.
Dentro de los proyectos mineros, se encuentra Tía María de US$ 1,400 millones. En medio de la polémica por las diferentes posiciones del Ejecutivo respecto a dicha iniciativa de cobre, Jacob comentó el estado de la misma.
“Hemos trabajado con la población de Islay en diversos programas y el proyecto ha mejorado en su aceptación. Esperamos pueda destrabarse lo más rápido posible. Tenemos todos los permisos al día y los recursos para iniciar Tía María en el momento que tengamos buena disposición para llevarlo adelante”, comentó a Gestión, tras mencionar que el referido monto de inversión sería actualizado por efectos de inflación. A la fecha, la empresa ha avanzado con la compra de equipos para dicho proyecto.
Sobre la postura de Otárola, quien el martes aseguró que el proyecto Tía María no está en la agenda del Ejecutivo, Jacob consideró que dichas declaraciones responderían a que el Gobierno mantiene la preocupación por el clima de incertidumbre que vivió el país tras la salida del ex presidente Pedro Castillo. “Eso lleva a que se den declaraciones más cuidadosas respecto a algunos temas, pero tenemos la disposición a trabajar para que el proyecto avance y sea desarrollado lo más rápido posible”, manifestó.
La situación de Los Chancas, Michiquillay y fundición de Ilo
En los proyectos mineros de Southern, Jacob mencionó también a Los Chancas (Apurímac) y Michiquillay (Cajamarca). En la primera iniciativa, detalló que están por iniciar el estudio de impacto ambiental (EIA) y en la segunda están empezando las actividades de exploración.
Si bien refirió que los trabajos en Michiquillay se reiniciaron el 2018 cuando la empresa ganó la buena pro del proyecto, afirmó que la exploración se inició con fuerza este año con perforaciones luego de varias décadas. Desde que el anterior operador Asarco estudió la geología del yacimiento de cobre, han pasado 60 años.
En función de los avances a la fecha, la empresa espera operar Los Chancas desde el 2030 y Michiquillay desde el 2032.
Respecto al proyecto metalúrgico, el ejecutivo destacó que los estudios económicos y técnicos están prácticamente terminados para la nueva fundición de cobre en Ilo. Así, ahora trabajan en la etapa inicial de los permisos.
Si bien esta iniciativa aún no tiene la aprobación explícita del directorio de la empresa, mencionó que esperan la operación de la nueva fundición desde el 2029. Para ello, la construcción debería iniciar tres años y medio antes.
La inversión para el 2024
Para el 2024, Jacob adelantó que la inversión en sostenimiento de minas y el desarrollo de proyectos sería superior a la de 2023, inclusive sin incluir el inicio de construcción de Tía María. En las otras iniciativas habrá actividades que demandarán más capital que este año.
“En la exploración referida a Michiquillay habrá un gasto más importante. En Los Chancas ya estaríamos trabajando en algunas labores vinculadas al EIA”, mencionó. Precisó que el monto exacto del capex se definirá a inicios del próximo año.
De poder iniciar la construcción de Tía María, refirió que las obras en el primer año demandarían alrededor de US$ 150 millones.
La ampliación de Cuajone
En medio de la interrupción de actividades en la mina de cobre Cuajone (Moquegua) por 54 días debido a protestas el 2022, el directorio de Southern no llegó a discutir la anunciada ampliación de su capacidad de molienda. Si bien el proyecto todavía no se ha presentado a los directores, la firma avanza en mejoras que harían posible la iniciativa.
“La idea es ampliar la operación sin aumentar la huella ambiental o el consumo de agua sobre la base de incrementar la recuperación o reciclaje de agua con la construcción de una planta piloto de relaves secos (barros). Si terminamos las pruebas y todas son positivas, procederemos a presentar el proyecto al directorio”, anotó Jacob.
En la sesión de directorio de octubre próximo, indicó que presentarán un reporte sobre estos trabajos y, en función de los comentarios que reciban, plantearán posteriormente el proyecto de ampliación con mayor detalle.
Claves
- Producción. En el 2023, Southern Perú proyecta aumentar su producción en 8% a 372,000 toneladas de cobre contenido en concentrados, con el impulso de la operación estable de Cuajone y mejores leyes en Toquepala.
- Compras. Este año, Southern Perú ha revisado algunas propuestas para potenciales compras, pero las mismas no han llegado al directorio de la compañía por las características de las mismas.
- Demanda local. La demanda peruana de cobre refinado para producción de cables y otros artículos ya representa el 5% de las ventas globales de Southern (incorporando la oferta de las minas en México).
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Bachiller en Comunicación Social (Universidad Nacional Mayor de San Marcos). Trabajé en radio y prensa escrita y, desde el 2013, soy redactor de la sección de Negocios del Diario Gestión.
