El programa de Boeing Co. para certificar una nueva versión de su jet 737 Max está retrasado y es posible que no cumpla con la fecha límite de fin de año, advirtieron reguladores de la aviación en una carta esta semana.
El Max 10, una versión extendida del avión insignia de un solo pasillo de la compañía que fue inmovilizado en el 2019 después de dos accidentes fatales, debe ser aprobado por la Administración Federal de Aviación (FAA, por su sigla en inglés) para diciembre o podría tener que asumir un rediseño costoso.
A la FAA le preocupa que el programa “enfrente desafíos significativos” para cumplir con la fecha límite, dijo en una carta enviada el 21 de marzo a Boeing. El documento le pedía al fabricante que presentara la proyección de un nuevo cronograma para solicitar las aprobaciones de la agencia federal.
La carta fue descrita a Bloomberg News por una persona familiarizada con su contenido que pidió no ser identificada.
“Seguimos trabajando de manera transparente con la FAA para proporcionar la información que necesitan y seguimos comprometidos para cumplir con sus expectativas”, dijo Boeing en un comunicado enviado por correo electrónico. “La seguridad sigue siendo el factor impulsor en esta iniciativa”.
Cualquier retraso prolongado en el Max 10, el avión de un solo pasillo más grande de Boeing, podría afectar a clientes como United Airlines Holdings Inc.. La aerolínea con sede en Chicago tiene contemplado tomar 109 de los aviones de Boeing el próximo año, dijo Sheila Kahyaoglu, analista de Jefferies, en un informe el viernes.
El fabricante de aviones tiene pedidos para al menos 568 Max 10, según un análisis de Bloomberg Intelligence de los datos de Cirium. Boeing no revela sus recuentos de pedidos para modelos Max individuales. El Max 8 de tamaño mediano es el más popular de la familia de fuselaje estrecho, con 2,068 aviones pedidos.
Una ley de reforma y responsabilidad que el Congreso aprobó en diciembre del 2020, a raíz de los accidentes de aviones Max que cobraron la vida de 346 personas, requiere diseños de seguridad actualizados para las aeronaves. Pero le dio tiempo a Boeing para completar su trabajo en el Max 10 antes de que los nuevos estándares entraran en vigencia.
Dado que el Max 10 está diseñado para funcionar de manera idéntica a los modelos Max anteriores, que vuelven a estar en servicio después de amplias actualizaciones en los sistemas de control de vuelo, tener que realizar cambios adicionales podría agregar nuevos costos. También podría hacer que el avión fuera menos compatible con otros modelos Max, lo que requeriría capacitación adicional para los pilotos y otras complejidades en las aerolíneas.
El Congreso tendría que enmendar la ley para darle a Boeing más tiempo si no cumple con la fecha límite del Max 10 para fines de este año.
Seattle Times reportó sobre la carta anteriormente. Boeing registraba poca variación a las 11:52 a.m. en Nueva York.