Christian Lengua
La empresa peruana fabricante de mobiliario de oficina Visso dio un vuelco a sus operaciones en el 2020. Luego de nueve años posicionándose como proveedor de estudios de arquitectos, grandes empresas, mypes y del sector educativo, la pandemia lo obligó a enfocarse en muebles para home office y a apurar el estreno de su canal online.
Las ventas de la firma venían creciendo a razón de 20% anual y para el 2020 la proyección era lograr un 25% respecto al 2019. Las metas de enero y febrero se cumplieron, e incluso hasta quincena de marzo se logró toda la proyección del mes, hasta que llegó el confinamiento. En reuniones de emergencia, los accionistas plantearon dos estrategias: el ingreso al hogar e implementar su plataforma de comercio electrónico.
“El año pasado el home office no estaba pronosticado, así que pasó de cero y se convirtió en el 45% de las ventas totales de la empresa. Eso es algo que no lo teníamos estimado”, comentó Carlos Vizurraga, gerente general de Visso.
El ticket promedio de estos equipos (silla ergonómica más escritorio) está por los S/ 1.500, dependiendo del tipo de silla que escoja el cliente. Los modelos Nórdico en escritorio y Arco en sillas son los que más rotación tienen. De hecho, se prefieren más las sillas a nivel gerencial, porque tienen más prestaciones en ergonomía.
Otra apuesta fue apurar el e-commerce que estaba programado para fines de año. Eran meses de muchas quejas por los incumplimientos de las entregas en los diferentes marketplaces. Así que en Visso plantearon que si los pedidos se hacían antes de las 5 p.m. se entregaban al día siguiente. Y en caso no le guste el producto al cliente, regresan a tienda el mueble y la empresa reembolsa el dinero.
“Esto fue apreciado por el segmento y nos permitió crecer, y es por eso que tenemos tan buenos comentarios sobre nuestros productos. Empujamos la calidad que teníamos para las oficinas corporativas al home office, obviamente con productos ajustados para ese mercado porque el espacio es distinto”, precisó Vizurraga.
Dichas medidas permitieron que las ventas de Visso en el 2020 no se vieran tan afectadas. No tuvieron el crecimiento planificado, pero mantuvieron las mismas cifras del año anterior. Con respecto al presente año, se han hecho proyecciones sobre la base de una serie de escenarios, pero el resultado de análisis es que volverán a los niveles prepandemia a inicios del 2022.
Mercado extranjero
En Visso saben que a nivel interno, el 2021 no será un año tan positivo y por ello han decidido impulsar la venta en el extranjero. “Si la torta se achica en el mercado local tenemos que ir a buscar a otros lados. Este año vamos a vender afuera, porque es lo que la coyuntura nos está empujando a hacer. Igual ya lo teníamos proyectado”, precisó el ejecutivo.
Acaban de concretar la venta directa de mobiliario de oficina en Panamá, y los despachos deben empezar en marzo próximo, pero todo depende del confinamiento. Además, tienen negociaciones avanzadas en Bolivia, y Ecuador está en cartera para fines de año.
Nuevos segmentos
Visso cuenta con una fábrica de 2 mil metros cuadrados en San Juan de Lurigancho y un showroom en San Isidro. Al tener disponibilidad en la fábrica, vienen estudiando el ingreso a otros segmentos. Uno es mobiliario médico, también preparan una línea para el hogar con consolas y muebles de entretenimiento, y también con mobiliario para hoteles.
Vizurraga comentó que planean entrar con todas las fortalezas de la marca en el mobiliario de dicho rubros. La proyección es que para los próximos dos años ya van a estar posicionados en esos segmentos. “Lo lograremos con todo el expertise que tenemos, no solo en la fábrica, sino también en marketing, investigación y desarrollo, y soporte de ingeniería”, acotó.
Adquirir el modelo de industria 4.0, con mucha tecnología e innovación, es algo que le ha costado mucho a la empresa, aseguró el gerente. “Para nosotros ha podido ser más fácil traer una marca de fuera y venderla aquí, pero buscamos hacer país y generar mano de obra. Apuntamos a ser el referente”, sostuvo.