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Albemarle Corp. busca obtener una certificación para asegurar una minería responsable en sus operaciones de litio en Chile en respuesta al mayor escrutinio de los impactos ambientales y sociales de la industria.
El mayor productor mundial de este metal clave para baterías está comenzando una evaluación por parte de terceros bajo la norma de certificación IRMA, informó la empresa el jueves en un comunicado. Los auditores entrevistarán a gerentes, trabajadores y comunidades de los alrededores del salar de Atacama, además de revisar datos y documentos, desarrollar acciones correctivas y divulgar los resultados.
El proceso de certificación es el último esfuerzo de la cadena mundial de suministro de baterías para hacer frente a la creciente preocupación entre los inversionistas y el público en general por la sostenibilidad de las industrias que producirán los componentes básicos para la transformación de la energía limpia. Entre los miembros de IRMA se encuentran fabricantes de automóviles que compran productos de litio.
“Estamos estudiando cómo esto nos permite posicionarnos con nuestros clientes actuales y con los potenciales”, dijo Ellen Lenny-Pessagno, vicepresidenta de sostenibilidad del litio de Albemarle.
La empresa y su principal rival, SQM, están aumentando la producción en Atacama, que cuenta con las mayores reservas del mundo, en respuesta a la creciente demanda mundial. Eso está poniendo de manifiesto la fragilidad de los ecosistemas desérticos, antes considerados resistentes al método de bombeo de salmuera en enormes piscinas de evaporación. Las minas de cobre, las comunidades y el turismo también compiten por el agua en el salar.
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La auditoría sobre la gestión del agua, los derechos humanos, las emisiones y el trabajo justo se realiza en un momento en que las empresas de recursos naturales están bajo la lupa en Chile, donde se está redactando una nueva Constitución que podría conducir a normas más estrictas. El anuncio de IRMA también coincide con una huelga de un mes de los trabajadores de las operaciones de procesamiento de Albemarle en el país.
Sin embargo, la técnica de evaporación de salmuera es más limpia que la minería de roca dura que se practica en el principal productor de litio, Australia. Albemarle se ha comprometido a reducir el uso de agua dulce y comparte el 3.5% de los ingresos en Chile con las comunidades indígenas.
“Los consumidores tienen normas mucho más estrictas en cuanto a la forma en que se realiza la minería hoy en día”, dijo Lenny-Pessagno. “Una cosa es decir que somos sostenibles. Otra cosa es que un tercero diga que lo somos”.
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El litio está dejando atrás a materias primas como el petróleo y el aluminio, ya que el ingrediente de las baterías va camino a registrar su mayor alza anual en al menos una década. La demanda de vehículos eléctricos se está acelerando y, en cuanto a la oferta, los años de precios bajos y la pandemia han frenado las inversiones.
Una estrechez similar del mercado de carbonato de litio provocó una avalancha de producción que puso en jaque el último repunte, pero esta vez hay menos nuevos participantes al acecho, dijo el analista de Bloomberg Intelligence Christopher Perrella. “Los productores traen la oferta y se empeñan en adecuarla a la demanda”.
