Las ganancias del primer trimestre del banco estadounidense Morgan Stanley superaron las expectativas, ya que el aumento de los ingresos de su división de gestión de patrimonios compensó los descensos de sus unidades de banca de inversión y negociación.
Sin embargo, las acciones caían más de un 2% en las operaciones previas a la apertura de los mercados.
Los ingresos de la banca de inversión cayeron un 24%, a US$ 1,250 millones, mientras que los de la unidad de gestión de patrimonios crecieron un 11%, con US$ 110,000 millones en nuevos activos netos.
Los bancos de inversión de Wall Street han sido los más afectados por la caída de las fusiones y adquisiciones, ya que los inversores han huido de las apuestas arriesgadas en un contexto de volatilidad de los mercados y rápida subida de las tasas de interés.
Las turbulencias también han paralizado prácticamente las ofertas públicas iniciales (OPI), ya que las nuevas empresas posponen su salida al mercado hasta que mejore la confianza de los inversores.
El descenso de la actividad de banca de inversión, que constituye el núcleo del negocio de la entidad, redujo sus ingresos totales casi un 2%, a US$ 14,500 millones, en el trimestre.
“Las inversiones que hemos realizado en nuestro negocio de gestión de patrimonios siguen dando sus frutos”, dijo James Gorman, presidente ejecutivo, en un comunicado.
Los resultados de Morgan Stanley completan una agitada temporada de presentaciones de los principales bancos de Wall Street, tras la quiebra de dos prestamistas de tamaño medio en marzo que provocó conmociones en todo el mundo y avivó aún más el temor a una recesión.
Morgan Stanley reservó US$ 234 millones en el trimestre, frente a los 57 millones de hace un año, preparándose para el deterioro del sector inmobiliario comercial y el posible retraso de los clientes en el pago de sus préstamos, en un contexto de aumento de los costos financieros y de preocupación por la recesión.
El banco ganó US$ 1.70 por acción, superando la estimación promedio de los analistas de US$ 1.62 por acción, según datos de Refinitiv.
El beneficio aplicable a los accionistas ordinarios del banco en los tres meses finalizados el 31 de marzo descendió a US$ 2,830 millones, o US$ 1.70 por acción diluida, lo que contrasta con los US$ 3,540 millones, o US$ 2.02 por acción diluida, de un año antes.
Fuente: Reuters