El pasado 29 de abril, la empresa concesionaria del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, Lima Airport Partners (LAP), comunicó que en un plazo de 30 días presentará “el diseño de cómo será el futuro terminal de pasajeros, considerando una propuesta de futura operación con dos terminales a partir de enero de 2025″.
La compañía, cuyo principal accionista es la alemana Fraport, también indicó que se “acordó dejar sin efecto el Plan de Desarrollo Aeroportuario (PDA), documento técnico sobre la operación del Jorge Chávez que fue presentado en el 2021″.
El mismo día, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) emitió también un comunicado confirmado que se había firmado un acta con LAP en dicho sentido.
LAP considera que un terminal dual de crecimiento modular, en lugar de un solo terminal central —que era lo estipulado en un principio—, provee condiciones flexibles para una operación eficiente.
De otro lado, los gremios aeroportuarios, antes de emitido el comunicado de LAP, habían cuestionado las modificaciones al terminal. Mientras que Patricia Benavente, expresidenta de Ositran, considera que dicho acuerdo incumple el contrato de concesión.
Durante la última conferencia de resultados trimestrales, realizada el 10 de mayo, el CFO de Fraport, Matthias Zieschang, comentó la situación actual del Aeropuerto Jorge Chávez y qué medidas tomarían en caso el MTC no acepte la nueva propuesta.
Terminal
“El nuevo diseño conceptual que presentaremos en los próximos 30 días tiene que ser aprobado por la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC). Y este incluirá un plan sobre cómo se realizará el nuevo terminal de pasajeros”, dijo Zieschang.
El CFO de Fraport aseguró que la discusión abierta no gira en torno al terminal en sí, sino en la forma y el momento en el que se realizará la construcción de sus módulos.
“Nuestro plan era empezar a pequeña escala, o con solo una parte del terminal, y luego abrirlo. También se usaría el terminal existente y, posteriormente, avanzaríamos de forma modular como un segundo paso para expandir el terminal”, dijo Zieschang.
El representante de Fraport mencionó que el MTC, en un primer momento, requirió el terminal central completo.
“Desde una perspectiva de presupuesto, es lo mismo. Pero nuestro enfoque era el de asignar el capex en un periodo de tiempo más largo, pues no necesitamos tener inmediatamente el terminal en su plena expansión, mientras que ellos sí lo querían de manera inmediata”, precisó refiriéndose al ministerio.
“Ahora tenemos que mostrarles cómo vamos a gestionar esta propuesta modular y somos muy optimistas de que será aprobada. Pero en el improbable caso de que el resultado sea negativo, por supuesto que vamos a construir inmediatamente el terminal central, lo que significa que nuestro presupuesto no crecerá, pero que el capex se asignará en un periodo más corto”, concluyó Zieschang.