En los últimos años, a raíz de la pandemia, el mercado de franquicias en el Perú ha sufrido cambios. Actualmente, se estima que hay alrededor de 500 franquicias en el país, mayoritariamente del rubro gastronómico; sin embargo, los inversionistas ya empiezan a poner foco en nuevos sectores. Además, debido a las condiciones económicas a nivel local e internacional, las formas de negociación de las mismas se han flexibilizado
“A pesar de las dificultades como la inestabilidad política y la guerra entre Rusia y Ucrania, las franquicias en el Perú han mostrado solidez. Se han negociado regalías y adaptado nuevos formatos. Ha sido un complemento para darnos oxígeno”, dijo Lidian Gamarra, presidenta de la Cámara Peruana de Franquicias.
Al primer semestre del 2023, se ha registrado una recuperación de las franquicias, aunque a un ritmo lento comparado con los niveles del 2019. “La ruta es positiva, pero no hay un despegue”, comentó Gamarra. Prepandemia el mercado crecía entre 12% y 15%, mientras que en 2022 apenas llegó a 7%. Según la ejecutiva, se espera que el avance al cierre del 2023 sea a doble dígito.
De acuerdo con Susana Gutiérrez, coordinadora del Centro de Desarrollo Empresarial de Franquicias de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), durante el primer semestre del año el sector con mejor desempeño y el más rentable para invertir sigue siendo el gastronómico, con un 68% de participación.
Se observa una tendencia al alza en los rubros de salud, salones de belleza, gimnasios y negocios vinculados a mascotas, los cuales han registrado un crecimiento del 8% en los últimos años.
Gamarra sostiene que en el rubro de gastronomía se han visto bajas en los últimos años, mientras que el número de franquicias vinculadas a mascotas, que en la Cámara Peruana de Franquicias suman 15, va en crecimiento.
“Muchas (firmas relacionadas a mascotas) todavía no están franquiciando, pero se encuentran trabajando en su marca para luego incorporar el concepto de franquicia”, aseguró Gamarra.
Rebeca Antezana, presidenta de la Asociación Peruana de Empresarios de Belleza (APEB), dijo que en su sector el negocio de franquicias se ha ralentizado. “Solo se han culminado los acuerdos realizados prepandemia”, anotó.
LEA MÁS: Nuevas franquicias en Perú: Toni Pons, heladerías y “gastro gaming”
Nuevas formas de negociación
Con la finalidad de que el modelo no pierda su atractivo, a pesar del contexto económico, los franquiciantes han optado por dos estrategias. Según detalló Gutiérrez, ahora se negocia el canon de entrada (derecho que se paga al adquirir una franquicia). Es decir, se le brinda al inversionista la opción de pagar una parte del canon y posteriormente completar la diferencia.
Otros empresarios no cobran canon, pero sí exigen que se realice una compra de insumos por un monto determinado para iniciar con las operaciones de la franquicia.
También se ha optado por la negociación de regalías. “Algunos empresarios están optando por no cobrarla, por lo menos los primeros seis meses de haber iniciado operaciones con la franquicia, hasta que el negocio se encamine bien”, afirmó Gutiérrez.
Gamarra explicó que de esta manera se promueve que haya más locales, aunque sacrificando las ganancias. “Antes no había mucha negociación, era muy rígido y el cobro aproximado era de entre US$ 20,000 y US$ 60,000”, precisó.
LEA TAMBIÉN: La receta para asegurar la calidad del producto durante la expansión de la franquicia
Franquicias low cost
Gutiérrez apuntó que las franquicias low cost siguen cobrando protagonismo y que ya representan el 30% del mercado con tendencia al alza.
El costo de una franquicia de este tipo oscila entre los US$ 15,000 y US$ 30,000. En el caso de los formatos tradicionales, el costo varía entre los US$ 60,000 y US$ 100,000. Las que están por encima de este costo son adquisiciones menos frecuentes.
Internacionalización
Hasta el momento, aproximadamente el 20% de las franquicias peruanas han cruzado fronteras. El ritmo de expansión se vio afectado desde la llegada de la pandemia, refirió Gutiérrez.
El sector gastronómico sigue siendo el principal rubro de expansión internacional. “Colombia es uno de los destinos favoritos para las franquicias peruanas”, señaló.
Agregó que “existe una fuerte tendencia de expansión en el mercado de Estados Unidos, particularmente a Miami, Florida, donde prevalecen los negocios latinoamericanos que han migrado a ese país”. Ejemplo de ello es la franquicia peruana Embarcadero 41, que cuenta con dos locales en Miami.
El 65% de las franquicias se encuentra en la capital, mientras que el 15% se ha expandido provincias, en su mayoría a Arequipa, Ica, Piura, Trujillo, Cajamarca y Cusco.
Disfruta tus descuentos del Club de Suscriptores cuantas veces quieras gracias a tu suscripción a Gestión. Más de 300 promociones esperan por ti, descúbrelas Aquí. Y si aún no eres suscriptor, adquiere tu plan AQUÍ.
Licenciada en periodismo y comunicación por la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), con mención en periodismo televisivo. Actualmente redacto en la sección de Negocios del diario Gestión y conduzco Gestión En Vivo.