La farmacéutica Adium Pharma, con base en Montevideo (Uruguay) y cuatro plantas de producción en la región, acordó con Moderna para colaborar en la distribución y comercialización de la vacuna Spikevax contra el COVID-19 en Latinoamérica.
“Como parte del acuerdo alcanzado, Adium colaborará con Moderna en la gestión de contratos de provisión ya vigentes con los gobiernos, así como también en la educación médica continua y la generación de nuevos acuerdos en países donde Spikevax aún no esté presente”, indica un comunicado emitido por la compañía.
El texto también recoge declaraciones del primer ejecutivo de Adium Pharma, Patricio Rodríguez, quien aseguró que están “encantados” de haberse asociado con Moderna, una empresa a la que definió como “líder en la lucha contra la pandemia”.
“Estamos ávidos por colaborar con la meta de expandir las tasas de vacunación en América Latina, ayudando a pacientes, médicos y Gobiernos en este esfuerzo. Esta alianza confirma nuestro propósito de suministrar a todo América Latina, tratamientos innovadores que ayuden a mejorar su calidad de vida”, subrayó.
Adium Pharma tiene presencia en Argentina, Bolivia, Brasil, Centroamérica, Chile, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, Perú y Uruguay.
Por su parte, Stéphane Bancel, consejero delegado de Moderna, dijo que la “colaboración con Adium ayudará a asegurar un acceso y un reparto más amplio de la vacuna del COVID-19 de Moderna por toda Latinoamérica”.
Bancel afirmó asimismo que la expansión de Moderna por todo el mundo permitirá que la farmacéutica “provea seguridad sanitaria contra el COVID-19 y enfermedades futuras que se puedan prevenir con una vacuna”.
La biotecnológica Moderna, con presencia comercial en once países (Australia, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Corea del Sur, España, Suiza, el Reino Unido y Estados Unidos), anunció en junio del 2020 que un mes más tarde comenzaría la tercera fase, y final, de su vacuna contra el coronavirus SARS-CoV-2.
En noviembre de ese año, la compañía informó en un comunicado que esta tenía una efectividad del 94.5% y que cumplía los criterios de eficacia exigidos para su comercialización.
La vacuna contra el COVID-19 de Moderna ha sido aprobada en más de 70 países, y en el 2021 se distribuyeron unos 807 millones de dosis por todo el mundo, de los cuales sólo un 25% fueron a parar a países de rentas bajas y medias, según las cifras de la empresa.