ExxonMobil adquirirá Denbury Inc., un especialista en recuperación mejorada de petróleo, por US$ 4,900 millones en el marco del desarrollo de una estrategia de producción baja en carbono, anunció el gigante petrolero el jueves.
La compra de todas las acciones proporciona a ExxonMobil la red de oleoductos de dióxido de carbono de Denbury en ricas regiones industriales de los estados del sur estadounidense como Texas, Luisiana y Mississippi, donde las compañías petroleras planean importantes proyectos de aislamiento de carbono en respuesta a las crecientes presiones por los efectos ambientales del cambio climático.
Se espera que el acuerdo de compra se cierre en el cuarto trimestre.
“La adquisición de Denbury refleja nuestra determinación de hacer crecer de manera rentable nuestro negocio de soluciones bajas en carbono al servir a una variedad de industrias difíciles de descarbonizar con una oferta integral de captación y aislamiento de carbono”, dijo el presidente ejecutivo de ExxonMobil, Darren Woods.
Las compañías petroleras han defendido el aislamiento de carbono como una respuesta importante al cambio climático. El proceso implica captar el dióxido de carbono liberado en la producción industrial y transportarlo a través de tuberías a sitios donde se deposita bajo tierra, eliminando los gases que atrapan el calor de la atmósfera.
Denbury también produce petróleo y gas natural a través del proceso de recuperación mejorada de petróleo, que inyecta gas de dióxido de carbono en las reservas de crudo parcialmente producidas para extraer así hidrocarburos adicionales.
En el primer trimestre de 2023, Denbury produjo unos 48,000 barriles de petróleo por día, una cifra sumamente baja frente a los 3.8 millones de barriles (mb) por día generados por ExxonMobil.
Fuente: AFP