Vistos los resultados de la agroexportación en la costa, los productores de la sierra central decidieron probar con cultivos como la palta hass, en terrenos antes destinados a la papa y las naranjas. Desde el 2020, las primeras cosechas ven la luz.
El presidente de la Federación de Cámaras de Comercio del Centro, Luis Calmell del Solar, señaló que los valles interandinos de Ayacucho, Huancavelica y el oriente de Junín fueron los escogidos para el sembrío.
Sin embargo, el creciente costo de combustibles y otros insumos por la pandemia ponen en jaque está naciente industria en la sierra.
“El negocio depende mucho del transporte. Hoy mandar un contenedor es muy caro, o trasportar abono desde la costa a la sierra también. Tenemos que ver cómo se va manejar esto”, comentó a Gestión.
Asimismo, aseguró que los pequeños productores carecen de asesoría técnica, créditos accesibles y otras medidas de apoyo de los gobiernos regionales o el Ministerio de Agricultura para aumentar los volúmenes y ser más competitivos.
En contraste, destacó la experiencia de productores de La Merced, San Ramón y Satipo, en la selva central, donde la apuesta por el jengibre o kion ya están dando resultados. Ahora, van hacia la industrialización.
“Se han abierto dos o tres plantas chicas de transformación. El producto tiene un mercado, su demanda creció por la pandemia y además se usa en todas las gaseosas blancas, hay un gran potencial”, resaltó.
Servicios
Consultado por el sector de hoteles y restaurantes, Calmell del Solar indicó que la recuperación ha sido menor a la esperada. Y aunque la mayoría de establecimientos han reabierto, aún hay cautela para apostar por remodelaciones y/o ampliaciones.
“La gente tiene miedo a invertir en su hotel. De repente reciben a la mitad de huéspedes que deberían tener. Hay algunos que están pidiendo préstamos familiares o de cajas municipales, pero esperemos una buena campaña de Semana Santa”, dijo.
Si bien muchos hoteles se orientaron al alquiler de habitaciones para largas estadías a inicios de la pandemia, refirió que todos ya volvieron a su actividad principal.
La mayoría se ubica el valle del Mantaro, Jauja, Huancayo, Concepción, Chupaca, Tarma y la selva central.
Oportunidad. Desde hace poco, el presidente de la Federación de Cámaras de Comercio del Centro, Luis Calmell del Solar, afirmó que se observa una migración de jóvenes a la selva central y, en particular, a Oxapampa, para hacer negocios. “Han decidido ir a vivir allá, en los próximos años vamos a tener sorpresas en sectores de forestación, ganadería y otros emprendimientos”, afirmó.