El clima de protestas violentas y bloqueo que ha marcado el escenario social y económico del país en los últimos días tendría también repercusiones en la situación financiera de las mypes.
Según Luis Almandoz, gerente general adjunto de gestión de negocios de Mibanco, es muy probable que se vea un incremento de los días de mora del sector microempresarial.
“Las protestas con carga violenta afectan el nivel de ventas, y por ende, el flujo de ingresos de los clientes del sector, y esto se agudiza con el toque de queda. El impacto no viene solo de aquellas zonas en conflicto, sino que, por los mismos bloqueos, el tránsito de las mercancías entre Lima y provincias se obstruye, teniendo efecto en la reposición de stock de los negocios. Todo ello posiblemente repercuta en el correcto flujo de pagos, se moverían los días (de pago) fuera de las fechas”, apuntó.
Wilber Dongo, gerente general de Negocios de Caja Arequipa, señaló que los impactos que pueden haber en la mora de los clientes del sector por la actual coyuntura son preocupantes.
“La morosidad se va a elevar sí o sí. En nuestra cartera tenemos el 95% de clientes en condición normal, pero esto se va a ir reduciendo por falta de ventas. Son los comerciantes de actículos estacionales (en referencia a fiestas de diciembre) lo que están más expuestos”, manifestó.
Almandoz destacó a las mypes del sector agrícola, transporte y comercio como aquellas sensibles a la coyuntura, sectores que también han sido señalados por otros analistas.
“En particular en el agro están expuestos al desperdicio de su producción, que es perecible, y también por el lado de exportaciones, que verían dificultad en llegar a los puertos”, agregó.
Impacto ya se está sintiendo
Almandoz señaló que ya se han visto comportamientos inusuales de algunos clientes en sus pagos. Asimismo, indicó que los desembolsos también se han visto reducidos por las protestas.
“Hay clientes que pagan sus deudas antes de sus fechas pactadas, pero en estos últimos días, un 2% o 3% de estos no lo ha hecho. El día de ayer vimos un primer impacto en nuestros desembolsos para la campaña navideña, que por lo general no se da. Vimos un 10% menos de lo que preveíamos colocar”, anotó.
Del mismo modo, Dongo mencionó que, en el mes de diciembre, han colocado 60% del potencial que esperaban en desembolsos.
Mypes verían deterioro su récord financiero
Almandoz indicó que posibles retrasos en los pagos podrían terminar en un deterioro de la calificación de crédito de los clientes. No obstante, espera que haya una mayor flexibilidad ante esta coyuntura.
“No es que no haya voluntad de pago, pues el escenario no depende de los negocios. No sabemos cómo se va a seguir desarrollando la coyuntura, y estamos prestos a dar las facilidades necesarias para los clientes. 35 de nuestras agencias están cerradas, y es algo que suma negativamente al escenario”, anotó.
Al respecto, Dongo resaltó que, a diferencia de la gran empresa, en el sector microempresarial paga principalmente sus deudas en establecimientos físicos, por lo que es más difícil este ejercicio bajo la actual coyuntura.
“El sector microfinanciero, que es muy líquido, hace el 65% de los pagos en oficina, no hacen transferencias. Lo que nos preocupa es la mala calificación del deudor. No es que no quieran pagar, sino que las agencias estás cerradas o no pueden llegar a estar por las protestas”, anotó.
A reglón seguido, invocó a la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) a tomar medidas similares a las de inicio de la pandemia, para evitar un castigo a las mypes.
“El regulador debe pronunciarse, sino la morosidad va a ser muy alta, si no se sopesa con, por ejemplo, el congelamiento de la deuda. Si no ocurre esto, las entidades microfinancieras nos vemos obligadas a castigar a un cliente que es puntual. Eso haría que un futuro no les demos crédito”, apuntó.
Dato
- La morosidad (créditos atrasados/créditos directos) fue 5.15% a nivel cajas municipales a octubre, según datos de la SBS.