La pandemia nos recordó lo frágiles y vulnerables que podemos ser y lo primordial que resulta tomar ciertas previsiones. No en vano, ante la emergencia sanitaria la demanda de seguros personales, principalmente de vida y salud, ha aumentado, señala Federico Fajardo, director ejecutivo de La Protectora.
Esto llevará a que la firma corredora, con 40 años en el mercado, experimente un crecimiento moderado de 10% este año, ligeramente por debajo de lo registrado en el 2020 (14%) cuando se desató el mayor impacto del COVID-19, debido a los problemas económicos que se han acentuado este 2021.
Revela que se han dado ajustes tarifarios en algunas tasas de riesgo, sobre todo en los riesgos humanos más que en los generales. Tan es así que la prima de seguros de vida y salud ha subido por tramos.
Explica que en la segunda mitad del año pasado se tuvo un primer impacto entre 10% y 15% en promedio; mientras que en las primas de los contratos que se están renovando este año también se han incrementado entre 20% y 25%, debido a que hay más gente atendiéndose y en vista de la llegada de la tercera ola del COVID-19.
“Sabemos que la facturación de un paciente hospitalizado en UCI por 30 días puede llegar a S/ 500 mil, dependiendo de la clínica y el nivel tarifario, lo cual impacta en los costos del seguro, que está ligado a la frecuencia y a la severidad de la emergencia”, detalla.
Los altos costos que ha representado el siniestro de vida y salud llevan a este ajuste tarifario; además los costos médicos, al margen de la pandemia, también han evolucionado entre 6% y 8%, al igual que el de los medicamentos, como se da todos los años, sostiene.
Impacto del tipo de cambio
Fajardo refiere que el tipo de cambio influye de igual manera en los ajustes tarifarios, porque muchas de las protecciones que compran las aseguradoras en el mercado internacional son en dólares. “Las aseguradoras tienen mecanismos de dispersión y compensación de pérdidas a través de coaseguros o contratos de reaseguros, que son mecanismos usados por las empresas aseguradoras para distribuir la responsabilidad de la cobertura de ciertos riesgos”, afirma.
Considera que ante ello es importante la asesoría de una empresa especializada en la contratación de seguros, porque hay muchos productos estándar que se comercializan a través de distintos corredores; sin embargo, los que tienen mayor experiencia pueden diseñar trajes a medida que se adecuen al presupuesto de las necesidades de las empresas y familias.
De otro lado, comenta que en la evaluación de los riesgos para poder dimensionarlos adecuadamente se necesita mucha información y más aún en el marco de esta coyuntura. Dentro de los seguros de daños, por ejemplo, hay un componente que son los seguros de riesgo sociopolíticos como vandalismo, huelgas, daños maliciosos, entre otros.
Menciona que en el Perú también es importante el tema de los sismos, “Solo en la última semana se han producido casi una veintena de temblores y 11 de ellos han sido superiores a 4 grados, y tomando en cuenta que hay un silencio sísmico importante eso hace que se den variaciones en la tasa de riesgos”, agrega.
No obstante, comenta que lamentablemente gran parte de la población no está asegurada. Aunque se ha dado una mejora, remarca que las primas de seguros sobre el PBI llegan a solo 2%, superando a Bolivia; pero por debajo de Colombia 3.2%, Brasil 4.1% y Ecuador 2.3%. “La situación económica es el freno principalmente de las mipymes”, acota.
Iniciativas de La Protectora
En cuanto a la compañía, Fajardo informa que están reinventando sus funciones, ya que en esta nueva normalidad han tenido que implementar redes de interconexión con el cliente, desarrollar su intranet y fortalecer su call center; además están desarrollando aplicativos personalizados y poniendo a disposición del cliente cotizadores online.
La Protectora tiene cuatro unidades de negocios: los seguros corporativos (que representan entre el 20% y 25% de la cartera); soluciones de salud (pólizas de riesgo, planes como EPS, entre otras); soluciones de riesgo para las familias y soluciones de contratación públicas.
Comenta que las necesidades de protección subsisten porque no solo de trata de cuidar la vida y la salud, también de velar por otros intereses asegurables como los daños a las propiedades, donde tienen una cartera diversificada.
“Nuestro objetivo es cocrear soluciones de la mano de los clientes. Tenemos experiencia diseñando productos que se pueden adecuar a los bolsillos de diferentes familias o segmentos como soluciones que tengan que ver con algunos seguros masivos o micro seguros que terminan siendo, por ejemplo, indemnizatorios. Todo esto con el respaldo de una aseguradora potente”, enfatiza.
Acorde a ello, y justo pensando en las poblaciones menos favorecidas, puntualiza que ya están manejando algunas soluciones de seguros vinculadas a productos financieros, como el desgravamen o multiriesgos de daños a la propiedad para pymes; indemnizatorios de cáncer y enfermedades graves; riesgos asociados a la protección de tarjetas de débito y crédito y a accidentes personales.