Tras el golpe de la pandemia, la economía peruana ‘rebotó' en el 2021 (13.6%), pero el efecto no duró mucho. En el 2022 se expandió solo 2.7% y para este año el MEF prevé un incremento de 3.1%. Tasas que no están ni cerca del 6% necesario para -por ejemplo- absorber a todos los nuevos trabajadores que salen al mercado laboral. A esto se suma un escenario social convulsionado por manifestaciones que iniciaron en diciembre y que, aunque han menguado, podrían reiniciarse.
Justamente, una opinión compartida entre la mayoría de gerentes generales es que en los próximos 12 meses la desaceleración económica (67%) y el incremento de los conflictos sociales (52%) son los dos riesgos más importantes para el crecimiento de su empresa, según el último Barómetro de los CEO, de Gestión e Ipsos Perú, en febrero.
En un contexto como este, al que se suman riesgos propios en cada sector, ¿qué decisiones están tomando los gerentes? El 60% de CEO que respondió el sondeo señala que las prioridades para su firma este año son mejorar eficiencia en procesos y/o reducir costos operativos.
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Willard Manrique, CEO del Grupo Crosland, comenta que la eficiencia es una ruta que acompaña a las empresas desde la pandemia y viene elevando la performance. Sin embargo, no puede ser la única. “El consumidor peruano viene cambiando sus hábitos en muchas categorías. Las empresas, en la gestión comercial, debemos considerar un rebalanceo de canales, cuidando la dependencia del canal moderno en la medida que el portafolio de productos pueda ser sustituido por marcas blancas y económicas, como se viene observando”, refiere.
Agrega que, desde el lado del consumo, el valor del dinero y una compra racional son cada vez más importantes, y que no se debe dejar de lado eso por enfocarse solo en las eficiencias internas. “Es importante no dejar de lado la mirada estratégica de mediano plazo por la incertidumbre. Las empresas están acostumbrándose a asumir el riesgo y volatilidad social y económica; y por eso trabajamos con constante reajuste de escenarios”, comenta.
Sangram Sahoo, gerente general de TCS Perú, dice que desde el sector tecnológico y de asesoría en TI destacan dos puntos estratégicos cruciales: la experiencia del cliente y la búsqueda de eficiencia es la constante capacitación de nuestros asociados. “Es crucial mantenernos actualizados en todo lo referente a investigación e innovación. El país tiene un potencial enorme en talento en TI”, cuenta.
Manrique puntualiza que, aunque la operatividad de la cadena de suministros vaya normalizándose con el menguar de las protestas, las empresas igual están adoptando estrategias que minimizan posibles riesgos futuros.
Conflictos sociales. Las manifestaciones se iniciaron en diciembre y alcanzaron su punto más alto en los primeros meses de este año. Pero han ido menguando en algunas zonas de país (aunque aún hay vías bloqueadas en el sur). En este contexto, el 47% de CEO considera que los conflictos sociales están disminuyendo. Sin embargo, hay un 31% que cree que se mantienen igual. Para Sangram Sahoo, gerente general de TCS Perú, la conflictividad llegará a buen puerto “en la medida que existan compromisos y diálogo”. Y Willard Manrique, CEO del Grupo Crosland, asegura que en el Perú, mientras existan problemas estructurales, tendremos grupos vulnerables y prestos a movilizarse. “En febrero, la Defensoría del Pueblo registró 219 conflictos sociales y más de mil acciones colectivas de protesta en enero. ¿Están todas resueltas? No podemos confiarnos de esta aparente desaceleración de la conflictividad social”, refiere.
¿Qué se espera para la inflación del 2023?
Tiene sentido que los CEO tengan como parte de sus prioridades la reducción de costos operativos, pues para los próximos 12 meses, el 92% espera que la tasa de inflación esté fuera del rango meta (entre 1% y 3%). De hecho, el 74% prevé que oscilaría entre 4% y 8%.
De acuerdo con la data del INEI, la tasa anual del Índice de Precios al Consumidor, correspondiente a los últimos doce meses, muestra una variación de 8.99% para el indicador Nacional y de 8.65% para el de Lima Metropolitana.
“Considerando que los precios ya han subido y la ‘corrección’ va a ser lenta, esos mayores costos se van a traducir en priorizar actividades (en las empresas). No necesariamente todos los proyectos considerados se podrán realizar, sino que se va a ver los más rentables y los que tienen más posibilidad de salir adelante. En esa línea, entendería que haya moderación o cierta baja velocidad en incurrir en gastos”, subraya Juan Carlos Odar, director de Phase Consultores.
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Para el economista, es difícil que la inflación retorne al rango meta este año y más bien se espera que avance hacia ello en los primeros meses del 2024. Sin embargo, resalta que hay factores que podrían retrasar incluso más esto. “Todo depende de los shocks. Por ejemplo, ahora se ha habla de una posible ocurrencia del Fenómeno de El Niño”, dice Odar.
Los dos CEO consultados argumentan en la misma línea. “La inflación tiene un impacto directo en el consumo. En nuestro país sigue superando el 8% desde hace más de 10 meses. Aunque se han reducido algunos costos de insumos de exportación, en algunas regiones la alza de precios es más significativa que en otras”, agrega Manrique.
“Seguir impulsando el crecimiento del país es igual de importante que mantener la inflación bajo control”, resalta Sahoo.
¿Cuál es el área donde ponen mayor atención las empresas?
Los CEO también revelaron en el sondeo que sus empresas están poniendo la mayor atención y recursos a las siguientes áreas: Comercial y/o marketing (33%) y tecnología, IT (21%). Mientras que sobre lo que menos se están enfocando es reputación corporativa (3%) y recursos humanos (6%).
“Nosotros usamos nuestras propias tecnologías de la información para la gestión de nuestro negocio para poder operar con estándares globales”, cuenta el gerente general de TCS Perú.
Prioridades y riesgos
Por Patricia Rojas, Directora de Public Affairs de Ipsos Perú
A diferencia de lo que está ocurriendo en otras partes del mundo, los resultados de la segunda edición del Barómetro de los CEO, de Gestión e Ipsos, sugieren que dentro de las prioridades de los encuestados no se encuentran los despidos ni el congelamiento de contrataciones para el 2023. El foco se encuentra más bien en la mejora de procesos, mencionada por el 60% de los CEO, seguida por la innovación y desarrollo de nuevos productos y servicios (37%), asegurar la liquidez (32%), mejorar la estrategia comercial (32%), transformación digital (28%) y la mejora o desarrollo de la estrategia de sostenibilidad (25%). Estas prioridades, al parecer, se sostendrían en la atención que los CEO declaran estar dando a sus áreas comerciales o de marketing (33%), tecnología (21%) y operaciones (17%).
Sin embargo, todo esto se da en un contexto en el que los CEO señalan que los riesgos más críticos para el crecimiento de las empresas en los próximos 12 meses se encuentran en la desaceleración de la economía peruana (67%) y el incremento de conflictos sociales (52%). Otros riesgos percibidos están en la inestabilidad del sistema democrático (30%), inflación (23%), incremento de tensiones políticas (21%) y la paralización de proyectos de infraestructura y minería (21%). Es decir, los principales riesgos se encuentran en la arena económica y la política.
Sobre la preocupación por los conflictos sociales, un 47% de los entrevistados percibe que estos están disminuyendo, 31% cree que se mantienen igual y 21% cree que están aumentando. En resumen, casi la mitad de los CEO aún no percibiría la disminución de conflictos del primer bimestre o quizás se muestran más cautelosos sobre su futuro.
En los últimos días las nuevas protestas no han logrado tener una convocatoria importante, pero sí tienen consecuencias en la actividad económica del sur, por ejemplo, donde se bloquean las de comunicación, lo cual afecta en mayor medida a las familias a través de menores oportunidades de empleo, incrementos de precios, desabastecimiento, etc. Todo parece indicar que solo una escalada fuerte de los conflictos sociales haría que las prioridades de los CEO cambien.