Ante la marcada incertidumbre política de los últimos meses, invertir en el extranjero es una alternativa a la que están recurriendo las grandes empresas peruanas para diversificar sus riesgos. Por esta razón, en junio ha cobrado impulso la adquisición de compañías o activos en el exterior por parte de organizaciones nacionales, así como la constitución de nuevas firmas de capital peruano.
Miran hacia nuevos mercados
De enero a junio se registraron nueve adquisiciones outbound (de compañías en el exterior), de las cuales cuatro corresponden al mes pasado, según el último reporte de Transactional Track Record (TTR). La cifra alcanzada en el primer semestre representa más de la mitad de la acumulada en todo el 2022, que con 17 compras fue un año particularmente dinámico para este tipo de adquisiciones. Se concretaron 11 en el 2021 y 2022, respectivamente, y 16 en el año previo a la pandemia.
Entre las compras más significativas de dicho periodo se encuentran la de la mexicana Dentegra Seguros Dentales por parte de Auna y la del proveedor chileno de infraestructura digital OMT por parte de Stracon.
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“Desde las últimas elecciones, la coyuntura política ha hecho que muchos grupos empresariales decidan diversificar sus inversiones. Ha habido muchísimo ruido y muchos de estos grupos decidieron tratar de desinvertir un poco de lo que tenían en el país para invertir en el exterior. Estas empresas ahora evalúan no solo países de la región, sino que también miran hacia Europa y Estados Unidos”, reveló Susan Castillo, socia especialista en Derecho Corporativo de Payet, Rey, Cauvi, Pérez Abogados.
En ese sentido, sostuvo que probablemente muchas de las transacciones hayan empezado a inicios de año y, como suelen tomar algunos meses, se estén concretando por estas fechas. Además, consideró que esta tendencia continuaría en los próximos meses, puesto que la situación política del país sigue siendo inestable. Las compañías peruanas están explorando Colombia, Chile, México, España y Estados Unidos.
Precios más atractivos
Yanira Becerra, socia del Área Corporativa de Martinot Abogados, indicó que así como el Perú, otros países de la región están atravesando situaciones de inestabilidad y crisis política, por lo cual muchas firmas están más dispuestas a vender sus empresas o activos a un menor precio que en una situación más favorable.
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“Las crisis son un buen momento para comprar. Por ejemplo, si una empresa ya evaluaba ingresar a Colombia, puede encontrar mejores precios en estos momentos y animarse a dar el paso. De esta manera diversifica el riesgo ante la incertidumbre de desarrollar operaciones en Perú y encuentra más oportunidades para expandirse”, explicó.
En algunos casos, las compañías optan por comprar una participación en las firmas del exterior para así generar sinergias e ingresar a un mercado en mejores condiciones que si lo hicieran solas.
A ello se suma que las empresas peruanas están optando cada vez más por constituir compañías en el exterior con el fin de tener una cartera de inversiones más diversificada y/o de expandirse. En particular lo están haciendo las del rubro servicios.
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“Estamos viendo que es más frecuente que las empresas se constituyan directamente en nuevos países de destino. Antes no era tan usual, casi siempre ingresaban mediante la compra de una compañía. Constituirse directamente implica un camino más empinado, pero evita que la empresa pase por ciertas dificultades propias de las adquisiciones”, explicó Becerra.
Junio marca la pauta hacia la recuperación
De enero hasta la fecha, suman 58 las transacciones de compra y venta de empresas o activos que involucran a firmas peruanas, de acuerdo con el reporte de TTR. Esta cifra evidencia una caída de 12% con respecto al mismo periodo del año pasado. De dichas operaciones, 22 se concretaron en el segundo trimestre del año, y equivalen a una caída de 39% con respecto al mismo trimestre de 2022. Siete de las transacciones se registraron en enero, seis en febrero, 24 en marzo, 10 en abril, cinco en mayo y ocho en junio.
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Estas caídas no sorprendieron al mercado, que proyectaba un menor movimiento debido a la crisis política desencadenada en diciembre pasado. Tras meses de cierta lentitud, en junio se vio una llamativa recuperación, asegura Becerra.
“Desde mi perspectiva, hay un incremento marcado de las operaciones en junio. Se ha visto más ingresos de inversionistas del extranjero, que están comprando empresas o constituyéndolas de manera directa. Las que más optan por comprar son compañías que vienen de una cultura muy diferente y que tendrían dificultades para empezar de cero, mientras que esto último es más fácil para las empresas de otros países de la región”, comentó.
Según sus estimaciones, si el mensaje presidencial genera tranquilidad para los inversionistas, es muy probable que el segundo semestre sea muy dinámico y se logre recuperar en gran medida el número de transacciones obtenido en el 2022.
