
El sector de exploración de hidrocarburos peruano suma un nuevo actor internacional de peso. El Gobierno autorizó la modificación de los contratos de licencia para los lotes Z-61, Z-62 y Z-63, ubicados frente a las costas de Lambayeque y La Libertad, lo que permite el ingreso de Chevron Perú Exploration al negocio exploratorio.
Según los decretos supremos publicados, Anadarko Perú cederá un 35% de participación a la estadounidense Chevron y otro 30% a Westlawn Perú, manteniendo así la operación de los bloques con una estructura de consorcio más diversificada. Estas áreas comprenden más de 1.8 millones de hectáreas en conjunto.
La decisión, oficializada a través de los Decretos Supremos N.° 014-2025-EM, N.° 015-2025-EM y N.° 016-2025-EM, habilita la incorporación de los nuevos socios al consorcio y dispone el cambio de razón social de la empresa operadora. De acuerdo con la publicación en El Peruano, la norma fue refrendada por la presidenta Dina Boluarte, junto con los titulares de Economía y Finanzas, Raúl Pérez Reyes Espejo, y de Energía y Minas, Jorge Luis Montero Cornejo.
De acuerdo con Perupetro, Anadarko se encuentra procesando e interpretando la información sísmica 3D adquirida en 2024 y, dependiendo de los resultados, decidirá si avanza a la siguiente fase de exploración.

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Antecedentes exploratorios de la “mayor apuesta offshore”
Los bloques Z-61, Z-62 y Z-63, situados en los fondos marinos frente a las costas de La Libertad y Lambayeque, abarcan aproximadamente 1.8 millones de hectáreas combinadas y forman parte de la Cuenca Trujillo. Estos yacimientos se encuentran en aguas profundas, con profundidades que oscilan entre los 1,000 y 2,400 metros, lo que los convierte en zonas de exploración extremadamente complejas.
Desde el 2017, Perupetro suscribió contratos de exploración y explotación con Anadarko Perú, respaldado luego por Occidental Petroleum (OXY) tras su adquisición en 2019. La inversión inicial prevista rondó los US$ 200 millones, destacando la exploración profunda como la primera de su tipo en la historia del país.
En 2024, Anadarko completó una campaña de adquisición sísmica 3D de más de 6,000 km², la mayor realizada hasta ahora en aguas peruanas, lo que representa un paso esencial en la evaluación técnica del área. Este trabajo incluyó estudios en los tres bloques y avanza bajo un riguroso marco ambiental y regulatorio.
De acuerdo con estimaciones oficiales, el Ministerio de Energía y Minas proyecta que, de confirmarse reservas comerciales, los lotes marinos Z-61, Z-62 y Z-63 podrían llegar a producir hasta 200,000 barriles diarios. En paralelo, Occidental Petroleum (OXY) ha calculado que la Cuenca Trujillo albergaría entre 3,000 y 4,000 millones de barriles prospectivos, un volumen que posiciona a esta zona como la mayor apuesta exploratoria offshore del país, aunque aún sujeto a los resultados que arrojen las próximas fases de perforación.