
Centenario Urbanizaciones, división del Grupo Centenario especializada en el desarrollo de ciudades planificadas, afronta un bienio 2025-2026 clave para su estrategia de crecimiento. Tras un 2024 orientado a la optimización de procesos internos, la digitalización y un análisis exhaustivo del mercado nacional, la compañía ha definido un plan de expansión que contempla consolidar su presencia en regiones estratégicas y diversificar su portafolio de proyectos. Actualmente activa en nueve ciudades, la empresa busca capitalizar nuevas oportunidades en plazas emergentes e ingresar a mercados donde hasta ahora no tenía presencia.
Carlos Conroy, vicepresidente de Desarrollo Urbano de Centenario Urbanizaciones, comentó que, a finales de 2024, la empresa inició un proceso de transformación hacia un modelo de negocio más dinámico y de alta rotación, con la meta de adquirir entre cinco y seis terrenos por año. En los últimos 18 meses, la compañía ha comprado cinco terrenos ubicados en Huacho, Pisco, Piura y Carabayllo, además de uno próximo a lanzarse. “Hemos analizado a detalle el mercado a nivel nacional, con el objetivo de identificar las ciudades con mayor potencial, evaluando tanto la demanda como la disponibilidad de terrenos”, indicó.
Actualmente, Centenario Urbanizaciones opera en nueve ciudades y proyecta cerrar el año con un portafolio de 20 proyectos, frente a los 16 de 2024. En este plan de expansión, la empresa ingresó a nuevas plazas estratégicas. En Huacho, por ejemplo, el lanzamiento de un proyecto en el primer trimestre superó las expectativas, lo que impulsó la búsqueda de un segundo terreno para 2026. “El norte chico ofrece condiciones favorables para el negocio: mercado con buen poder adquisitivo, demanda por desarrollos formales y un entorno dinámico gracias a las inversiones vinculadas al puerto de Chancay”, señaló Conroy.
Otro ingreso relevante se dio en Pisco, donde la compañía desarrolla un proyecto cerca al malecón, con un inicio de ventas positivo. La expansión también ha alcanzado otras regiones, con un nuevo proyecto en el centro de Piura —que permitirá operar dos desarrollos en paralelo en esa ciudad— además de un nuevo lanzamiento en Carabayllo.
En paralelo, la división del Grupo Centenario incorporó nuevas etapas (de construcción) en proyectos activos en Chiclayo, Trujillo, Piura y Lima Sur. Antes de fin de año, prevé habilitar dos etapas adicionales en Ica y Tacna, con lo que alcanzará cerca de 3,000 lotes habilitados y un crecimiento estimado de 10% en ventas respecto a 2024. “Este modelo de inversión estable y enfocado busca garantizar el crecimiento sostenido y la reposición de terrenos, con la meta de incrementar las ventas en un 15% en 2025”, agregó.

LEA TAMBIÉN: Minka a nuevas manos: Centenario acuerda su venta a Parque Arauco por S/ 381 mlls
Inversiones hacia 2026 con el ingreso a la selva
Con su nuevo modelo de negocio de alta rotación, y más allá de los avances registrados en la primera mitad del año, Centenario Urbanizaciones planea sumar entre dos y tres adquisiciones adicionales antes de finalizar el año. La clave de este enfoque radica en el tamaño de los lotes, que ahora oscilan entre 20 y 30 hectáreas, lo que permite ciclos de venta de dos a tres años como máximo.
En materia de inversión, la compañía ha destinado en 2025 alrededor de S/ 120 millones a habilitaciones urbanas y a la compra de terrenos contemplados en su plan. Para 2026, el presupuesto se mantendrá en el mismo orden, lo que permitirá sostener el ritmo de adquisiciones y la ejecución de obras. “En contraste con el modelo anterior, que apostaba por grandes extensiones de tierra y, en algunos casos, por cambios de zonificación, la compañía ahora prioriza la rapidez. Desde la compra del terreno hasta el inicio de su comercialización transcurren menos de tres meses. Esta agilidad optimiza procesos, reduce plazos y mejora la rentabilidad”, señaló Conroy.
En su plan de expansión, Centenario ha identificado dos tipos de plazas estratégicas. Por un lado, las ciudades donde ya tiene presencia y puede desarrollar más de un proyecto, como Piura, Chiclayo y Trujillo, que destacan por su demanda sostenida, buen poder adquisitivo y el posicionamiento consolidado de la marca. En Chiclayo, por ejemplo, la empresa opera en el distrito José Leonardo Ortiz y, en 2026, abrirá un nuevo proyecto en Pimentel. En Piura mantiene dos proyectos en simultáneo, mientras que en Trujillo está presente en las zonas de Huanchaco y Moche.
Por otro lado, la empresa apunta a zonas nuevas con alto potencial. Entre ellas figura todo el norte chico, desde Huacho hasta Barranca, así como la sierra, con especial interés en Huancayo, donde prevé lanzar un nuevo proyecto debido a los buenos resultados históricos en esa plaza. “Un tercer frente es la selva, una región en la que no hemos tenido prácticamente presencia, pero que ha ganado atractivo por el crecimiento poblacional y económico en varias ciudades amazónicas. La compra de nuestro primer terreno en esta zona está prevista para inicios de 2026, con el lanzamiento del proyecto ese mismo año”, adelantó el directivo.

LEA TAMBIÉN: Centenario Urbanizaciones “habilitará” mayor inversión y nuevo modelo de negocio
Cambios en el comportamiento del consumidor
Hace quince años, el comprador típico de lotes residenciales en Centenario Urbanizaciones era, en su mayoría, un trabajador independiente, emprendedor o comerciante. Ese segmento sigue siendo relevante, pero hoy cerca del 50% de los clientes son trabajadores dependientes, un público más exigente en la evaluación de productos y con especial interés en el financiamiento. La compañía ha respondido a esta tendencia con esquemas de pago directos que se ajustan a los flujos de cada cliente, permitiendo avanzar en sus proyectos sin comprometer su estabilidad económica.
A esta base se ha sumado un grupo creciente de inversionistas que adquiere terrenos con una perspectiva de mediano o largo plazo, apostando por la plusvalía de los activos sin la necesidad inmediata de construir. “Con estos tres perfiles —independientes, dependientes con planes de edificación e inversionistas—, la estrategia de la empresa se centra en ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades financieras y objetivos de cada segmento", anotó el directivo.

Por su parte, Conroy añadió que el comprador actual también se caracteriza por estar mejor informado y por valorar la formalidad en las transacciones. Según cifras de la consultora Grade, menos del 10% de los terrenos vendidos en el país cumplen con estándares formales. Este contexto ha reforzado la preferencia por empresas que aseguran la independización de los lotes, el acceso a servicios y opciones de financiamiento seguro. “La mayor conciencia de los consumidores ha fortalecido la posición de la oferta formal frente a la informalidad”, señaló.

Licenciado en Comunicación de la Universidad de Lima, con especialidad de periodismo y comunicación corporativa. Actualmente redacto en la sección negocios del Diario Gestión.