Cómo reanudan sus operaciones las empresas tras la cuarentena

La mayor parte ha refinanciado y reprogramado tanto obligaciones con el sistema financiero como con sus proveedores.

Nessus Hoteles

La compañía, que tiene como una de sus marcas a Casa Andina, durante el estado de emergencia redujo al mínimo sus operaciones debido a la baja ocupación. A junio, sus actividades se reanudaron en un 35%.

Asimismo, la compañía presentó una solicitud de suspensión perfecta de labores en abril, y en julio ha presentado la ampliación de la misma para un grupo de trabajadores. Debido a la emergencia sanitaria, ha reducido el 64% de su personal. Dicho porcentaje también comprende el cese por mutuo disenso. Nessus Hoteles también accedió a Reactiva Perú y ha reprogramado los créditos que tenía a mediano plazo. La variación de sus ingresos totales registra una caída de 9.48%.

Corporación Lindley

Las actividades de producción no se paralizaron, aunque enfrentó una restricción en la distribución de sus productos que generó una reducción de 35.5% en las ventas del 16 de marzo al 30 de junio, comparadas con el mismo periodo del ejercicio del año anterior.

Cabe señalar que la caída de las ventas en junio pasado fue menor a la registrada en abril del 2020. A junio ha reducido el personal a plazo fijo en 18%.

Asimismo, ha renegociado los plazos de pago con algunos proveedores y accedido a un crédito de Reactiva Perú. La firma realiza un análisis de las variaciones de su actividad cada diez días. Los ingresos totales en el segundo trimestre arrojan una caída de 40.8%.

Leche Gloria

La empresa no paralizó sus actividades, aunque por la pandemia se afectó de forma parcial la distribución y comercialización, debido al cierre de algunos canales de ventas, como es el caso de los hoteles, restaurantes y cafeterías, así como por la cancelación de clases escolares.

Las ventas a restaurantes y cafeterías se ha reactivado en 70%. La empresa ha tenido que incrementar su planilla para garantizar la continuidad de sus operaciones y suplir al personal en condición de riesgo. Leche Gloria registra una variación de 15% en sus ingresos totales.

Intralot

Las operaciones de la firma, que entre otras marcas maneja La Tinka, en el canal retail se suspendieron durante la cuarentena, los mismos que representan el 90% de sus ingresos operativos. La actividad se ha reanudado parcialmente y aún está pendiente el 25%.

Intralot ha reducido en 13% su personal administrativo y en 40% su personal de ventas. Asimismo accedió al programa de subsidios de 35% de la remuneración para aquellos trabajadores que ganan hasta S/ 1,500.

También ha refinanciado pagarés con dos bancos y reprogramado deudas con proveedores. Los ingresos totales han disminuido en 74%.

InRetail Perú

Si bien no suspendió su actividad, desde el 16 de marzo, 21 centros comerciales operados por la subsidiaria InRetail Shopping Malls dejaron de operar parcialmente y solo mantuvieron operativo el 20% del área arrendable, correspondiente a supermercados, bancos y farmacias.

En tanto, Supermercados Peruanos e InRetail Phama no han suspendido sus operaciones. Desde el 22 de junio han vuelto a abrir sus centros comerciales, con excepción de los ubicados en Arequipa, Huánuco y Chimbote. Aproximadamente el 25% del área arrendable de los malls se encuentra pendiente de reanudar actividades. Los ingresos totales tuvieron un crecimiento de 4.8%.

Cosapi

La constructora suspendió la mayor parte de sus actividades, con excepción de los trabajos de mantenimiento del programa Provías. A la fecha, la reanudación es progresiva y están pendientes de reinicio proyectos que representan el 35% de las ventas del 2020. Inicialmente Cosapi decidió aplicar la suspensión perfecta de labores, pero luego desistió. En términos generales, incluyendo obreros, la disminución de trabajadores se ubica entre 25% y 30%, incluyendo los consorcios.

A nivel financiero, Cosapi Gestión Inmobiliaria accedió a Reactiva Perú mientras que Cosapi Minería aún tramita su solicitud. También se ha refinanciado gran parte de la deuda a largo plazo. Los ingresos totales han sufrido una variación de -37%.

Graña y Montero

El grupo constructor suspendió actividades en las áreas de ingeniería y construcción, infraestructura e inmobiliaria debido a la pandemia. Actualmente, ha reiniciado operaciones. Es así que en ingeniería y construcción solo está pendiente de reanudar el 5% de los proyectos. En el caso de infraestructura, falta reanudar el 20% de los proyectos, mientras que en el sector inmobiliario aún no se reanuda el 16% de las iniciativas en construcción y el 15% de las salas de ventas.

En cuanto al personal en Graña y Montero SAA hubo una disminución de 18%, en ingeniería y construcción en 15%, en infraestructura en 2% y 8% en el área inmobiliaria.

Además, se han refinanciado y reprogramado obligaciones financieras que representaban el 13.5% al cierre del primer trimestre del año. En adición, también se renegociaron los términos de pago con algunos proveedores no financieros. La variación de sus ingresos totales fue de 18.6%.

Saga Falabella

Las tiendas de la cadena estuvieron cerradas desde el inicio de la cuarentena hasta la última semana de junio y actualmente la actividad se ha reanudado en casi su totalidad.

Saga Falabella no solicitó suspensión perfecta de labores, pero si accedió al programa estatal de subsidios para el pago de planillas. La variación de sus ingresos totales ha sido de -20.6%.