Peatones pasan frente a la entrada de los estudios de TV Azteca SAB en la Ciudad de México, México, el lunes 12 de enero de 2015. Azteca pertenece al multimillonario Ricardo Salinas. Fotógrafo: Susana González/Bloomberg
Peatones pasan frente a la entrada de los estudios de TV Azteca SAB en la Ciudad de México, México, el lunes 12 de enero de 2015. Azteca pertenece al multimillonario Ricardo Salinas. Fotógrafo: Susana González/Bloomberg

La declaración de este viernes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de que la fase de emergencia del COVID-19 ha terminado fue en gran medida simbólica. Pero, en un giro extraño, la decisión podría tener ramificaciones para los acreedores que intentan cobrar US$ 400 millones de bonos impagos en Ciudad de México.