El COVID-19 aplazó la realización de diversos eventos y fiestas sociales, como son los matrimonios y fiestas de cumpleaños; por ello, ante el levantamiento de las restricciones y el 100% de aforo en los locales, las celebraciones aplazadas se empezaron a dar con mayor volumen.
Ello además ha dinamizado a sectores que brindan servicios a festejos privados, como son los emprendimientos de food trucks, cuya demanda se da de manera creciente.
Así lo indicó el presidente de la Asociación Peruana de Food Truck, Julio Meléndez, quien sostuvo que aproximadamente 30% ha crecido el requerimiento de estas unidades de comida rápida, principalmente, por fiestas de matrimonios y quinceañeros, observándose incluso números mejores que en 2019, período en el que si bien se demandaban estos servicios, no se alcanzaba el interés de hoy.
De este modo, explicó que en un mes es posible tener entre dos o tres actividades en las que se requiere de este tipo de alimentos.
“Nuestra diferencia con el catering tradicional es quizá el tiempo que demora implementar la logística; además, del precio. Nuestro servicio permite que los dos o tres food trucks que pueden requerir por evento, se movilicen de una forma mucha más práctica, así como también se adapten rápidamente a las instalaciones que por ahora siguen siendo preferentemente al aire libre”, explicó.
Y a la par que crecen los requerimientos de actividades privadas también aumentan los pedidos de eventos institucionales, dijo.
Promoción
Julio Meléndez también indicó que se viene trabajando con el Legislativo una iniciativa que buscaría declarar a los food trucks como unidad de micronegocio, a fin de lograr un mejor “posicionamiento ante los municipios” que haga posible la venta de los alimentos en los sitios públicos.
“Estamos recabando la información necesaria; a partir de la experiencia en distritos como San Miguel, donde es posible el desarrollo del negocio en sitios públicos”, dijo.
Los food trucks vienen creciendo en ciudades como Cusco, Iquitos, Piura, entre otros.
En corto
Delivery. El representante sostuvo que aun cuando los food trucks siguen creciendo, sobre todo en provincias, otros servicios como el delivery ha cedido ante el retorno de la presencialidad. Refirió, por ejemplo, la situación de los dark kitchens que aparecieron en pandemia y que atendían a través de reparto. “Muchos emprendedores vieron una oportunidad en esta modalidad y así trabajaron durante los meses de restricciones, pero hoy las condiciones han cambiado”, indicó.