En sus primeros años en el mercado, la peruana Be Sifrah traía del exterior hasta 95% de los artículos que comercializaba en sus tiendas. Pero con el transcurso del tiempo las compras de productores nacionales se ha ido incrementando, tras constatar que podían cumplir sus estándares de calidad, señala Jesús Escobedo, gerente de administración y finanzas del Grupo MBC Intercorp, a la cual pertenece el mencionado retailer.
Compras a productores nacionales
Así, en la actualidad el 30% de las compras de Be Sifrah las realiza a proveedores locales, mientras que el 70% son importaciones. En carteras, por ejemplo, el 50% son fabricadas en el Perú y el otro 50% en el exterior.
“Estamos en un proceso de fortalecimiento de la compra de mercadería local, sobre todo de bisutería y carteras. Hemos identificado proveedores locales que cumplen las exigencias de calidad y estamos trabajando con ellos”, dijo Escobedo en entrevista con Gestión.
Algunas de las ventajas que ofrece la compra a los productores locales son los menores costos de envío y la mayor disponibilidad de los artículos, lo cual es de gran importancia para la empresa que incorpora nuevos artículos a sus tiendas con frecuencia mensual.
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En la actualidad, la línea principal del negocio de Be Sifrah es la de bisutería, que concentra el 50% de sus ventas. Además, cuenta con las categorías de accesorios de cabello, artículos de belleza, mochilas y carteras, y prendas de vestir. En esta última incursionaron a fines de 2022, y para este año la empresa planea reforzarla con la expectativa de incrementar su participación en las ventas, que aún es mínima.
En ese sentido, Jesús Escobedo afirma que ha logrado adaptar su oferta a la extensión del periodo de calor, con mayores compras de ropa de verano y de media estación.
Por otro lado, el gerente comentó que hasta la fecha el target del negocio ha venido siendo el de mujeres de 18 a 40 años, por lo general emprendedoras o profesionales, pero ahora la compañía está trabajando en un plan de marketing para conquistar al público de más edad, invitando a estas mujeres a utilizar los productos de Be Sifrah para resaltar su belleza.
Inversiones en tiendas
La empresa peruana empezó a operar en agosto del 2016 y desde entonces su número de tiendas ha crecido con gran rapidez. El año pasado abrió 13 locales y dos más en lo que va de 2023, con lo cual suman 46 tiendas. Asimismo, la marca planea invertir S/ 6.5 millones este año en la apertura de 20 o más nuevas tiendas y S/1 millón en la remodelación de cuatro o cinco de sus establecimientos.
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Tales aperturas implican la llegada de Be Sifrah a Moquegua, en abril; a Iquitos y probablemente a Cusco este año. También evalúa la posibilidad de llegar a Ica. Además de Lima, la empresa ya tiene locales en Arequipa, Trujillo, Huancayo, Chiclayo y Piura. Además de consolidar su presencia en el país, la empresa está evaluando su posible salida al exterior.
Dichas aperturas permitirán a Be Sifrah crecer 80% con respecto a sus ventas del año pasado. Cabe recordar que durante los primeros meses de 2022 todavía se sintieron los efectos de la pandemia del COVID-19 en las ventas; sin embargo, al cierre del año la empresa logró incrementar su facturación en 80% con respecto al 2019, en especial por su mayor número de tiendas. En el primer trimestre del año en curso, Be Sifrah ha alcanzado ventas 10% mayores a las esperadas por la empresa, señala su gerente.