La división Crop Science (Ciencia de Cultivos) de la empresa alemana Bayer AG tiene grandes expectativas de crecimiento en América Latina durante la próxima década, y prueba de ello es su reciente apuesta de lanzar iniciativas de agricultura sostenible y amigable con el medio ambiente en México y Brasil.
“Aquí [América Latina] es donde esperamos el mayor crecimiento para la próxima década”, dijo el presidente de Crop Science, Liam Condon, en diálogo con Gestion.pe. “Tenemos el nuevo maíz de baja estatura en México y la iniciativa de captura de carbono en Brasil como prueba piloto, y el objetivo es implementarlos en el resto de América Latina porque son relevantes para todos los países”.
Si bien cada país en la región tiene sus propios enfoques y prioridades en el sector agrícola, Liam Condon señaló que el enfoque de Bayer de cara al futuro es asegurarse de conectar mejor a los agricultores que producen de forma sostenible con las empresas de alimentos. Para el ejecutivo, que lleva 14 años en la empresa alemana, un ejemplo de ello podrían ser los superalimentos peruanos y su creciente demanda en el mundo.
“Son alimentos producidos de forma climáticamente inteligente. Muchos consumidores están dispuestos a pagar extra por ellos y las empresas de alimentos buscan conectarse con los agricultores, pero estos deben cumplir con prácticas sustentables certificadas”, dijo Condon, luego de su participación en la charla virtual ‘Diálogos del Futuro de la Agricultura’ de Bayer.
“A diferencia de Brasil, para el Perú es más interesante centrarse en ciertos cultivos de mayor valor en lugar de enfocarse solo en cultivos de tipo commodity”, agregó. “Lamentablemente, el gran interés por la quinua y el resto de superfoods -para los cuales hay un precio de consumo muy alto en Europa y América del Norte- no se ha traducido en lo que llamamos un precio justo para el agricultor, debido a que se pierde demasiado dinero en el medio”.
Cambio climático
Ante los desafíos del cambio climático, el directivo de Bayer sostuvo que, gracias a la fertilidad de su suelo y el clima variado, el Perú “está en una mejor posición y tiene más oportunidades” para adaptarse a este fenómeno global, en comparación con otros países que vienen sufriendo de las consecuencias como graves sequías.
Una de las iniciativas medioambientales de la firma con sede en Leverkusen, Alemania, es precisamente el ‘secuestro de carbono’ en casi medio millón de acres en Brasil y Estados Unidos, con el que busca ayudar a los productores a generar ingresos mediante un programa que consiste en la captura de carbono del suelo.
“El interés ha sido más grande del que podíamos atender, por lo que tuvimos que limitar la cantidad de campos de cultivo en esta primera etapa, que es cuando debemos asegurarnos de que exista un enfoque muy científico, con muchas pruebas y verificaciones que no podemos hacer en varias zonas al mismo tiempo”, explicó Liam Condon.
“La meta es aprender de esta primera etapa y luego escalar relativamente rápido para después aplicar los aprendizajes en otros países. Esto será muy relevante también para el Perú a medida que avancemos, porque la idea básica es recompensar a los agricultores no solo por los cultivos que producen, sino también por ayudar a abordar el cambio climático al secuestrar más carbono en el suelo”, agregó.
Es muy beneficioso porque, por un lado, enfrentamos el cambio climático y, por otro, podemos abrir nuevas fuentes de ingresos para los agricultores.
COVID-19
Según Liam Condon, uno de los aprendizajes que se puede extraer de la actual crisis del coronavirus es que el sistema alimentario en el mundo no es lo suficientemente resistente y, para mejorarlo, se requiere fortalecer a los pequeños agricultores. Con ese fin, el año pasado Bayer se fijó el objetivo de empoderar a cien millones de pequeños propietarios de tierras para el 2030. “En la actualidad trabajamos directamente con unos 42 millones”, remarcó.
“Estos pequeños agricultores están en América Latina, África y el Sudeste Asiático; en el hemisferio norte tiende a haber agricultores más grandes. Como parte de la respuesta al COVID, implementamos un programa de donaciones para 2 millones de pequeños agricultores y estamos desarrollando tecnología que es más adecuada para ellos, porque sus necesidades son diferentes a las de los grandes agricultores”, dijo el también miembro del directorio de Bayer.
Bayer Crop Science, la compañía resultante tras la adquisición en junio del 2002 de la división agraria de Aventis, también viene desarrollando soluciones de conectividad digital que están diseñadas exclusivamente para pequeños propietarios y están orientadas a conectarlos nuevamente a una cadena de valor. “Las soluciones para pequeños agricultores son una parte fundamental de nuestra estrategia general de ciencia de cultivos en el futuro y aquí América Latina juega un papel clave”, concluyó.