Itaú Unibanco Holding SA dijo que ha estado en conversaciones con el argentino Banco Macro SA sobre la venta de su filial local.
Itaú Unibanco Holding SA dijo que ha estado en conversaciones con el argentino Banco Macro SA sobre la venta de su filial local.

El Itaú, el banco privado más grande de Brasil y la principal entidad financiera de América Latina, aclaró este martes que está en conversaciones “preliminares” con el Banco Macro argentino para vender sus operaciones en ese país.

Aunque Itaú señaló que aún no se ha suscrito un documento sobre el tema, de confirmarse el negocio significaría la salida de Argentina del principal gigante financiero de la región.

Las conversaciones se producen en el contexto de una grave crisis económica que afecta a Argentina, con una economía que se contrae y una inflación anual que ha superado el 100% en los últimos meses. Argentina también se prepara para las elecciones presidenciales a finales de este año.

El Itaú Unibanco informa, además, que hasta el momento, no ha firmado un documento vinculante en relación con esta posible venta y comunicará inmediatamente al mercado cualquier información relevante sobre este hecho”, señala el comunicado enviado al mercado.

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De acuerdo con el Itaú, el Banco Macro S.A. es uno de los principales bancos privados de Argentina.

Aunque Itaú es un gigante en toda la región, en Argentina ocupaba en enero el lugar 18 entre los bancos en términos de activos, con 411.000 millones de pesos (US$2.300 millones al tipo de cambio oficial), mientras que Macro era el quinto, con 2.1 billones de pesos, según el Banco Central.

Cotizado en las bolsas de valores de Buenos Aires y Nueva York, la entidad cuenta con una amplia red de sucursales en el país y ofrece productos y servicios financieros en todo el territorio argentino, atendiendo a todos los segmentos, desde particulares hasta grandes empresas.

El Itaú, presente en 18 países y con importantes operaciones en Argentina, Chile, Colombia, Paraguay y Uruguay, obtuvo un beneficio neto recurrente de 8,435 millones de reales (unos US$ 1,707 millones/1,562 millones de euros, al cambio actual) en el primer trimestre del año, un monto un 14.5% superior al registrado en el mismo período de 2022.

En Argentina, el producto bancario en el período creció un 13% frente al trimestre inmediatamente anterior, en Paraguay un 12%, en Uruguay un 11%, mientras que en Chile retrocedió un 18%.

Los certificados de depósito estadounidenses de Macro se dispararon un 7.7% en Nueva York a US$ 20.68, el nivel más alto desde el 17 de abril, mientras que las acciones de Itaú subieron un 0.6% en São Paulo.

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Más allá de la inflación desenfrenada y la desaceleración del crecimiento económico, la tasa clave establecida por el Banco Central es negativa en términos reales, lo que dificulta a los bancos compensar y obtener ganancias en el entorno actual, que incluye la prohibición de transferir dividendos al extranjero. El crédito al sector privado es inferior al 15% del producto interno bruto.

Federico Mac Dougall, socio y asesor financiero de Deloitte para América Latina, dijo en un mensaje de texto que la situación actual representa una buena oportunidad para los grupos locales. Agregó que con estas compras incorporadas a su negocio pueden obtener rápidamente ganancias y un posible aumento del valor de sus activos en el futuro.

El retorno sobre los activos de los bancos extranjeros en Argentina cayó a un 2.6% en los últimos 12 meses, desde niveles de entre el 5% y el 10% en 2019, según datos del Banco Central hasta marzo.

Macro tiene una capitalización bursátil de US$ 1,300 millones, mientras que el valor de mercado de Itaú es de 247,000 millones de reales (US$ 50,200 millones).

Itaú cuenta con operaciones en Argentina desde 1979, centradas inicialmente en el apoyo a las actividades de grandes empresas con vínculos comerciales con Brasil. En 1998, hizo su mayor apuesta por la banca minorista cuando compró Banco del Buen Ayre por US$ 225 millones y se convirtió en el duodécimo mayor banco. El entonces presidente Roberto Setúbal dijo públicamente que el objetivo era estar entre los cinco más grandes de Argentina.

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Con información de EFE y Bloomberg