En los últimos años, las principales azucareras del Perú como Paramonga, Cayaltí, Laredo, Pomalca y San Jacinto han comenzado a explorar nuevos horizontes más allá de su tradicional producción de azúcar. La tendencia de la diversificación apunta hacia cultivos de alto valor como la palta Hass, los arándanos y las mandarinas, así como la incursión en el sector inmobiliario, como parte de una estrategia para mejorar su rentabilidad a largo plazo.
Aunque el rubro de la fruticultura y el sector inmobiliario les ofrece nuevas oportunidades de crecimiento, no están libres de escenarios adversos como los factores climáticos y la variación en los precios de los productos agrícolas. Si bien algunas empresas han visto un incremento en sus ingresos consolidados, la rentabilidad neta muestra una tendencia variable al cierre del primer semestre del año, lo que refleja las complejidades de estas nuevas iniciativas.
Apuesta por la palta Hass
En detalle, Agrícola Cayaltí—conocida por producir y comercializar caña de azúcar en Lambayeque—, a través de su subsidiaria Yarabamba, ha invertido en la producción de palta Hass, arándanos y mandarinas en más de 2,020 hectáreas.
LEA TAMBIÉN: Agrolmos con luz verde para conectar central térmica a línea de transmisión
Pese a las condiciones climáticas adversas que afectaron la producción de arándanos, durante el 2023, la producción de paltas alcanzó las 1,700 toneladas métricas, tras una alianza estratégica con la multinacional Wesfhalia, uno de los mayores comercializadores de paltas a nivel global. Para finales de año, tienen previsto ampliar su área de cultivo de arándanos en 250 hectáreas. Además, proyectan que en dos años, el peso de facturación entre la palta y arándanos responda por igual.
Al cierre del segundo trimestre del 2024, Agrícola Cayalti y sus subsidiarias han invertido en las plantaciones de arándanos y mandarinas, además de pozos en las zonas de San Nicolás para asegurar el abastecimiento del total de la demanda hídrica en estos campos. De acuerdo con la empresa, en dicho campo no se cultivaba por más de 40 años por falta de infraestructura hídrica y tecnología de riego. Dentro de sus proyectos a corto plazo, la compañía prevé la habilitación de 250 hectáreas para el cultivo de arándano, variedad Abril blue.
Las ventas de Cayaltí y Yarabamba en el segundo trimestre del año fueron menores en S/ 6,7 millones debido a la disminución en la venta de plantones de frutales en comparación con el año pasado. A pesar de esto, el ebitda mostró una mejora sustancial, alcanzando S/ 9,3 millones.
En la misma línea, la azucarera Paramonga (Grupo Paramonga), dedicada a la siembra, cultivo, cosecha y procesamiento de caña de azúcar, estableció un contrato de usufructo con Avaleza S.A. para cultivar palta Hass en el fundo Huayto Chico (Barranca) desde junio de 2022. Esta asociación, junto con un convenio de accionistas con otra empresa agrícola, representa un giro hacia el desarrollo de nuevos cultivos rentables. De enero a junio, el resultado de su utilidad asciende a S/19,8 millones impulsada por el aumento del precio del azúcar en comparación con el año anterior.
LEA TAMBIÉN: Azucarera Laredo prevé activar su brazo inmobiliario este año
Pomalca y Laredo hacia el sector inmobiliario
Mientras tanto, Pomalca con operaciones en Lambayeque, complementa sus operaciones agrícolas con actividades de promoción, intermediación y desarrollo de proyectos inmobiliarios. Esta estrategia ha permitido a la empresa aumentar sus ventas en un 24%, alcanzando S/ 110,7 millones en el primer semestre de 2024, impulsadas principalmente por un incremento en la producción de azúcar.
Sin embargo, la utilidad neta del periodo se redujo a S/ 2,08 millones, una disminución de S/ 3,3 millones respecto al mismo periodo del año anterior, lo cual indica una caída en el margen de rentabilidad.
Del mismo lado, la azucarera Laredo, dedicada al cultivo de la caña de azúcar y otros productos agrícolas, está facultada a realizar actividades de desarrollo y gestión de suelos e inmobiliario de forma directa o participar como inversionista en empresas de desarrollo y gestión inmobiliaria, constructoras y de corretaje inmobiliario. A través de su subsidiaria, Condominio la Merced, tiene como actividad económica principal todo lo relacionado a la promoción inmobiliaria, ejecución de proyectos de habilitaciones urbanas, construcción, así como a la compra y venta de bienes inmuebles.
Por otro lado, la azucarera San Jacinto, fundada en 1997, continúa centrando su producción en paltas y otros productos agrícolas. Aunque sus ingresos por ventas en el segundo trimestre de 2024 alcanzaron S/ 44,9 millones, esto representó una significativa disminución del 42% respecto al mismo periodo del año anterior.
Esta caída se atribuye principalmente a un descenso en las ventas de bolsas de azúcar, pese a un enfoque en la diversificación hacia productos como la palta.
A partir del tercer trimestre del 2021, según se consigna en la Superintendencia de Mercado de Valores (SMV), la compañía redefinió su rubro. “La actividad principal consiste en el cultivo, empaque, conservación, transformación e industrialización de paltas y otros productos agrícolas, los cuales son comercializados a nivel local y en el exterior”, señalan.
Temas que te pueden interesar sobre agroindustria:
- Jefaturas en Perú: las industrias que más ganan y los perfiles que destacan
- Agrícola Chavín de Huántar recibe préstamo: ¿qué plan tenía en cartera?
- Lionel Arce, gerente de Complejo Agroindustrial Beta, comparte cómo maneja vida laboral y familiar
Redactor de Negocios del diario Gestión. Formado en Periodismo en la UNFV y maestrista en la UNMSM. Trabajó en medios como Infobae, La República y Panamericana TV.
Comienza a destacar en el mundo empresarial recibiendo las noticias más exclusivas del día en tu bandeja Aquí. Si aún no tienes una cuenta, Regístrate gratis y sé parte de nuestra comunidad.