Azteca Comunicaciones presentó, el último 23 de agosto, un arbitraje de inversiones contra Perú ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI) por la caducidad del contrato suscrito con el Estado peruano para la operación y mantenimiento de la red dorsal nacional de fibra óptica (RDNFO).
De acuerdo con la información que figura en la web del CIADI, el caso ha sido iniciado invocando la alegada vulneración del contrato de concesión así como del TLC Perú - México.
Como se recuerda, hace dos años, esta empresa ya había anunciado su intención de iniciar un proceso si se caducaba el contrato, la que se concretó en julio del 2021.
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El representante de legal de la compañía, por aquel entonces, Enrique Ghersi, afirmó que se acudiría al CIADI si se resolvía el contrato.
Si bien se desconocen detalles de la demanda, en aquel entonces, se dijo que se pediría una compensación de US$ 180 millones. A lo que se añadiría US$ 200 millones extra por si entraba un nuevo operador.
En julio del 2021, el entonces ministro de Transporte y Comunicaciones, Eduardo González, a través de una resolución ministerial declaró la resolución del contrato de concesión para el diseño, financiamiento, despliegue, operación y mantenimiento de la red dorsal de fibra óptica firmado con Azteca Comunicaciones, la misma que data del 2014.
Este accionar se sustentó “por razones de interés público debidamente fundadas”. Desde entonces se dispuso que el Programa Nacional de Telecomunicaciones (Pronatel) asuma la operación y mantenimiento de la red dorsal de manera provisional, por un periodo no mayor de tres años.
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La red dorsal es una infraestructura que nació con la idea de llevar internet a las zonas más alejadas del país, por lo que se desplegó 13,636 kilómetros de fibra óptica a 180 capitales de provincias.
No obstante, la ambiciosa meta planteada no ha podido cumplirse ya que se encuentra subutilizada pues solo se usa el 4.7% de su capacidad instalada al cierre del 2021.
Sobre el uso de esta infraestructura, la capacidad contratada apenas ha aumentado de 20.4 Gbps en el cuatro trimestre del 2020 a 23.5 en el segundo trimestre del 2021. ¿Quiénes la usan? A setiembre de 2022, la RDNFO -compuesta por 332 nodos- contaba con 20 clientes.
Otro punto a tomar en consideración es que, al cierre de junio del 2021, los nodos de fibra óptica de la RDNFO están disponibles en 276 distritos a nivel nacional, mientras que de las empresas operadoras privadas en 908 distritos.
En tanto que, en 243 distrito, tanto al RDNFO y los privados disponen de nodos de fibra óptica. Solo en 40 distritos, donde su ubica la RDNFO, no habría nodos de fibra óptica de las empresas privadas. Igualmente, en 665 distritos donde se ubica los privados no tendrían presencia de nodos de la RDNFO.
Un punto que evitó el avance de la RDNFO ha sido el costo (rigidez tarifaria) que cobra por transporte de datos (internet) que es de US$ 23 Mbps más IGV (por contrato) cuando la tarifa promedio en el mercado ronda los US$ 10 por Mbps.
Procedimiento
El especialista en arbitrajes internacionales, Ricardo Ampuero, detalló a Gestión que el inicio del arbitraje no impacta automáticamente en la red dorsal, ya que el MTC -a través de Pronatel- puede seguir adelante con la administración y continuar buscando un nuevo concesionario.
“Si en el arbitraje se llegará a determinar que el Estado ha incumplido una obligación, entonces ordenaría el pago de una compensación”, agregó.
Se estima que el tiempo que toma un proceso arbitral puede ser -en promedio- entre tres y cuatro años.
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Claves
- Tras la salida de Azteca, esta infraestructura viene siendo operada y mantenida por Pronatel (entidad adscrita al MTC). Para su operación y mantenimiento, el MTC le asignó a Pronatel la suma de S/ 123′954,237 (US$ 32.2 millones) el 2022.
- Lo que no toma a consideración el monto asignado son los gastos adicionales como es el caso de sueldos de personal operativo y/o directivo, costos de alquiler de oficinas, mobiliarios, equipos informáticos para uso administrativo, los que son asumidos Pronatel.
Licenciada en Periodismo por la Universidad Jaime Bausate y Meza con 20 años de experiencia profesional. Laboró en medios de comunicación como TV Perú y Perú21. También ejerció en gremios como la SNMPE y SNI. Desde el 2016, es parte del diario Gestión.