La petrolera estatal saudí Aramco ganó US$ 39,500 millones (casi 38,000 millones de euros) en el primer trimestre del año, un 82% más que en el mismo periodo de 2021 y sus mejores resultados desde que la compañía salió a bolsa en 2019, todo impulsado por los altos precios del crudo.
Así lo indicó la petrolera en un comunicado en el que señaló que sus ingresos netos casi duplican los US$ 21,700 millones (20,800 millones de euros) del primer trimestre de 2021 impulsados principalmente por “los mayores precios del petróleo crudo y volúmenes vendidos, y mejores márgenes en “downstream” (refino y comercialización)”.
Con estos resultados, Aramco dijo que ha conseguido unos ingresos trimestrales “récord” desde que salió a bolsa en 2019 y añadió que repartirá en el segundo trimestre un dividendo de US$ 18,800 millones (18,056 millones de euros).
El presidente ejecutivo de Aramco, Amin Nasser, indicó que “en un contexto de gran volatilidad en los mercados globales”, la compañía sigue centrada en “ayudar a satisfacer la demanda mundial de energía que sea de fiar, asequible y cada vez más sostenible”, se apunta en la nota.
“La seguridad energética es vital y estamos invirtiendo a largo plazo, ampliando nuestra capacidad de producción de petróleo y gas para satisfacer el crecimiento anticipado de la demanda y creando valor a largo plazo para los accionistas”, aseveró.
Asimismo, Nasser se mostró “más optimista que nunca” sobre la contribución “positiva” de Aramco al colaborar con socios nacionales e internacionales con el fin de “explorar tecnologías y soluciones nuevas y emergentes, desde el desarrollo de tecnologías de transporte más limpias hasta el establecimiento de cadenas de valor de hidrógeno y amoníaco bajas en carbono”.
Aramco anunció también que su flujo de caja libre aumentó en un 68% interanual, de US$ 38,200 millones (36,690 millones de euros) registrados este trimestre en comparación con los US$ 26,500 millones (25,452 millones de euros) de los primeros tres meses de 2021.
El crecimiento de la compañía continúa en alza por los altos precios del petróleo, que también hicieron disparar en 2021 los beneficios de la petrolera, hasta un 124% más que el año anterior, periodo de crisis mundial provocada por la pandemia de la covid-19.