Azotado por el escándalo de corrupción Lava Jato y la moribunda economía de Brasil, una de las mayores constructoras del país está dando sus primeros pasos hacia el mercado crediticio.
Andrade Gutierrez SA está emitiendo nuevos bonos a cinco años en dólares a cambio de bonos más antiguos y costosos, con vencimiento en el 2021, emitidos bajo el canje de deuda del 2018. También vende bonos 2024 a un grupo privado de inversionistas.
La compañía ha tenido problemas los últimos años a medida que el negocio se estancaba en medio de una desaceleración económica y la cuantiosa investigación Lava Jato que atrapó a algunos de los principales ejecutivos de la industria. El año pasado, perdió un pago de bonos, antes de llegar a un acuerdo con la mayoría de los bonistas para intercambiar las notas por vencer por otras nuevas y efectivo.
“Andrade Gutierrez parece ser uno de los pocos sobrevivientes en un sector que se ha visto bastante afectado por los escándalos de corrupción”, dijo Roger Horn, un estratega sénior de mercados emergentes de SMBC Nikko Securities America en Nueva York, tras predecir que el canje sería exitoso.
La constructora quiere intercambiar US$ 356 millones en bonos con vencimiento en el 2021 que pagan un cupón del 11% por nuevos bonos con vencimiento en el 2024 que ofrecen un rendimiento del 9,5%, pero que tienen mayor cobertura colateral en caso de incumplimiento. Los bonos 2021 subieron un 21% este año, mientras que un índice de los bonos corporativos y soberanos brasileños arrojó 14.8% y un indicador equivalente para mercados emergentes repuntó 11.7%.
Además del intercambio, la firma dijo que está vendiendo bonos a inversionistas privados para recaudar dinero con el objetivo de financiar posibles reservas de la oferta de intercambio.
Andrade Gutierrez perdió su estatus de grado de inversión por Fitch Ratings a mediados del 2015 cuando su director ejecutivo, Otávio Marques de Azevedo, fue arrestado en medio de investigaciones de que la constructora, junto con Odebrecht SA, pagó sobornos al productor estatal Petróleo Brasileiro SA a cambio de contratos. La compañía luego acordó pagar una multa de 1,000 millones de reales como parte de un convenio de indulgencia.
En agosto, Fitch elevó la calificación de la compañía a CCC+ de CCC- tras citar su visibilidad mejorada del flujo de efectivo operativo, respaldada por nuevos contratos, una mejora de los márgenes operativos y la capacidad de desapalancamiento.
Ian McCall, quien supervisa US$ 200 millones en activos de mercados emergentes en First Geneva Capital Partners, dijo que el intercambio de deuda probablemente anunciará un retorno al mercado internacional de bonos. Andrade Gutierrez es la participación individual principal de su fondo.
“Andrade se hace cada vez más fuerte”, dijo McCall, quien aceptó la oferta de intercambio. “Se espera que los ingresos para el 2019 tripliquen los de 2018. Si continúa en esta trayectoria de crecimiento, podría encontrarse en condiciones de refinanciar a un precio aún menor”.