Agencias de turismo de aventura no pueden limitar responsabilidad en casos de dolo o culpa inexcusable

El turista o deportista debe cumplimentar un formato que deje constancia que ha tomado conocimiento y aceptado los riesgos que involucra la modalidad de turismo de aventura a desarrollar. Sin embargo, no puede renunciar en forma absoluta a sus derechos, por lo que firmar un documento —antes de realizar la actividad— en el que una empresa de deporte o turismo de aventura se exonera de responsabilidad no tiene validez legal.

“El Código Civil indica que (Art. 1328) es nula toda estipulación que excluya o limite la responsabilidad por dolo o culpa inexcusable del deudor o de los terceros de quien este se valga. En este caso, la agencia de turismo no quedaría exonerada de responsabilidad en los casos de dolo o de culpa inexcusable; y desde el punto de vista de los derechos del consumidor, una renuncia absoluta sería considerada una cláusula abusiva de ineficacia absoluta; y por ende, no puesta”, explica Fernando Castañeda Melgar, socio de Aramburú, Castañeda, Boero.

En caso de que se compruebe que una empresa de turismo de aventura no contaba con el equipo, el personal o los protocolos adecuados para el manejo de riesgos y emergencias, la agencia habrá incurrido en culpa inexcusable y será pasible de multas, medidas correctivas, pérdida de su Certificado de Autorización y pago de indemnizaciones, según la gravedad del caso.

El Estado supervisa a estas agencias a través de las Direcciones Regionales de Comercio Exterior y Turismo de los Gobiernos Regionales o quienes hagan sus veces dentro del ámbito de su competencia administrativa; y en el caso de la Municipalidad Metropolitana de Lima, el Órgano que ésta designe para tal efecto.

“El consumidor tendrá expeditos sus derechos en sede administrativa (ante INDECOPI) o judicial para formular los reclamos correspondientes por falta de información, idoneidad del servicio, indemnizatorios, e inclusive, cargos penales”, precisa Castañeda Melgar.