
El PBI peruano habría crecido cerca de 4% durante el primer trimestre del 2025, impulsado por un sólido desempeño en marzo, según proyecciones del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP).
Pese al contexto global incierto, las estimaciones coinciden con los cálculos del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que proyecta un crecimiento similar en los primeros meses del año luego que, entre enero y febrero, la economía peruana alcanzara un avance promedio de 3.4%.
Adrián Armas, gerente central de Estudios Económicos del BCRP, señaló que el desempeño de marzo fue especialmente favorable debido a que no se tuvo el efecto de feriado que sí afectaron en el 2024.
“Se ha trabajado normalmente, como sabemos, la Semana Santa fue en abril, entonces por esos días que el PBI va a ser mayor. Posiblemente el orden de magnitud puede ser de un 4.5% aproximadamente”, dijo durante su presentación del programa monetario del BCRP.
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Respecto al entorno internacional, Armas descartó que las decisiones de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) estén incidiendo directamente sobre la tasa de interés de referencia local.
“Cada economía hace los ajustes de su respectiva tasa de interés de política monetaria de acuerdo a sus propias condiciones macroeconómicas”, afirmó.
Frente al sesgo a la baja en las perspectivas de crecimiento global, el funcionario sostuvo que no se han observado impactos significativos sobre el flujo de capitales hacia Perú.
“Lo que más bien se ha visto recientemente es un dólar que se ha venido debilitando”, explicó.
Además, destacó que los precios de los principales productos de exportación del país, como los minerales, se mantienen en niveles elevados, lo que favorece los términos de intercambio.
¿La pobreza seguirá cayendo en 2025?
Recientemente, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) informó que la pobreza alcanzó una reducción en el 2024, ubicándose en 27,6% de la población ante la caída de los precios relativos de los alimentos y un crecimiento económico moderado.
Armas precisó que para este año se proyecta un crecimiento económico del 3.2% y una inflación controlada en torno al 2%, lo que permitiría una nueva reducción de la pobreza.
“Esa reducción de los precios de los alimentos que se dio en 2024 también se espera que se den en 2025. Tiene que ver con el proceso de reversión de los choques fuertes que tuvo el sector agropecuario en el 2022 y 2023 y que elevaron la tasa de pobreza. Entonces sí se esperaría, por tanto, que la pobreza se vuelva a reducir este año”, añadió tras ser consultado por Gestión.