Las tierras raras, de las cuales se ha anunciado el descubrimiento de un importante yacimiento en Suecia, son metales muy codiciados a nivel mundial e indispensables para la economía del futuro, en particular para las grandes tecnologías de la transición energética.
¿Qué son las tierras raras?
El término reagrupa 17 metales que no son particularmente difíciles de encontrar en la corteza terrestre.
Su “rareza” se debe a que es inhabitual hallar yacimientos de utilidad comercial, ya que estos metales se encuentran a menudo en pequeñas cantidades en el seno de minerales de los que son difíciles de separar.
Antes del descubrimiento sueco anunciado este jueves (un millón de toneladas de óxidos de tierras raras), el Instituto de Geofísica Estadounidense USGS evaluaba en 120 millones de toneladas las reservas mundiales. De ese total, China tiene los mayores yacimientos con 44 millones de toneladas, Vietnam tiene 22 millones, Brasil 21, Rusia 12 e India 7.
La demanda de estos metales continuaría creciendo. Para reemplazar a los hidrocarburos y alcanzar la neutralidad en carbono en el 2050, la Unión Europa necesitará para esa fecha 26 veces más de la cantidad actual, calculó la Universidad KU Leuven para Eurometales, asociación europea de productores de metales.
¿Para qué sirven?
Las tierras raras tienen una estructura atómica particular que está en el origen de numerosas propiedades físicas únicas.
Por ejemplo, el europio, que tiene una luminiscencia roja, se utiliza en las pantallas de televisión. El neodimio, naturalmente magnético, sirve para fabricar potentes imanes. Y el lantano es necesario para las pilas recargables utilizadas en gran número de aparatos electrónicos y vehículos híbridos.
Según un estudio del Servicio Geológico Británico, las tierras raras “son el grupo de elementos utilizado en el mayor número de productos de consumo en el mundo”.
Según el mismo instituto, las tierras raras juegan también “un papel vital en la protección del medio ambiente, mejorando la eficacia energética y permitiendo existir a buen número de tecnologías digitales”.
Liderazgo chino, ¿retraso de Occidente?
China tiene las mayores reservas pero su dominio es producto de “la concreción de una política industrial de largo plazo y las ventajas obtenidas por un atraso en la regulación de las industrias de extracción”, subrayó Jane Nakano, investigadora en Washington para el Centro Internacional de Estudios Estratégicos (CSIS).
China supo, con el correr de los años e inversiones públicas masivas, mantener una amplia red de tratamiento de los materiales brutos, lo que ha llevado a muchos productores en el mundo a exportarle sus minerales.
Sin embargo, este dominio esto se ha conseguido al precio de un fuerte tributo medioambiental.
¿Por qué la urgencia de diversificar el abastecimiento?
Entre divergencias comerciales y geopolíticas, las tensiones entre China y Occidente son numerosas. La UE y Estados Unidos sienten la urgencia de diversificar sus suministros de esas materias primas esenciales.
Los temores de bloqueos cuentan con un doloroso precedente: en el 2010 China cerró el grifo de tierras raras a Japón a raíz de un conflicto territorial.
Desde entonces, Japón diversificó su cadena de producción, firmando acuerdos con la empresa australiana Lynas en Malasia y desarrollando su sector de reciclaje.
En Estados Unidos se produjo otra alerta durante la reciente guerra comercial con China. En ese momento, mayo del 2019, el presidente chino Xi Jinping visitó una planta de tierras raras, lo que fue interpretado como una amenaza velada de embargo.
(Con información de AFP)