
En un mercado de GLP en el que Zeta Gas -cuya planta en el Callao es la segunda más grande- mueve alrededor de 1,000 toneladas diarias, el cierre temporal de su terminal ha generado preocupación por el abastecimiento. Ante esto, tal como adelantó Gestión, se espera que Pluspetrol y Solgas puedan asumir parte de la demanda, pero ¿cuánto podrían cubrir?
Rodrigo Perera, gerente de Administración, Finanzas y Abastecimiento de Solgas, confirmó que se tuvo una coordinación acelerada entre operadores privados, el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) y abastecedores internacionales, por lo apuntan a asumir una parte significativa del abastecimiento por los dos meses que estaría en mantenimiento Zeta Gas.
Si bien el mercado es dinámico y depende de dónde decidan abastecerse los transportistas, el vocero indicó que Solgas podría cubrir hasta la mitad del volumen de GLP que dejará de despachar Zeta Gas. El restante sería cubierto por Pluspetrol.
“Lo razonable es que una parte de esas toneladas vayan a Pisco y otra parte se quede en Lima, dependiendo del tipo de cliente y en dónde está su cliente final para hacer más eficientes sus costos logísticos. Nosotros de esas 1,000, podríamos atender unas 500 sin problemas”, comentó a Gestión.
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Esta capacidad se determinó luego de las coordinaciones con Osinergmin que permitieron evaluar cómo se podría gestionar la demanda en cada terminal, al dejar en claro la magnitud y tiempo de la parada de planta de Zeta Gas.
Cabe indicar que, según Perera, Solgas importa aproximadamente la mitad del GLP que llega al país por vía marítima.
“Más o menos un 30% del GLP que consume Perú es importado y nosotros como Solgas traemos la mitad de eso”, refirió.
Para enfrentar el actual panorama, la compañía ha asegurado volúmenes nuevos y coordinado la llegada de más buques en menos tiempo para mantener un stock estable en el Callao.
Asimismo, indicó que la empresa ha ejecutado adecuaciones internas para preparar su terminal ante una mayor demanda de camiones con más personal en las islas de despacho, refuerzos administrativos y de seguridad, y una ampliación coordinada con Osinergmin que incluye una nueva isla de carga para reducir los tiempos de espera.
Respecto a la capacidad de almacenamiento, Perera indicó que el terminal de Solgas supera las 15 mil toneladas nominales y que, solo en diciembre, llegarán dos buques importados adicionales, además del abastecimiento vía cabotaje.

Pero, ¿qué harán en caso se produzca una emergencia por un oleaje anómalo? El ejecutivo precisó que Solgas cuenta con entre 7 y 8 días de maniobra cuando su terminal está en capacidad plena.
Además, para cubrir estos riesgos por oleajes anómalos, indicó que se están asegurando que siempre haya buques esperando en el Callao, de manera que el terminal se mantenga lo más lleno posible.
“Si siempre hay un buque afuera, el terminal prácticamente va a estar siempre lleno, de forma de que si viene un ‘mal mar’ me encontraré con la mayor cantidad de stock posible y de esa manera se minimizan las posibilidades de restricciones. Aunque no es 100% seguro, nos da un grado de operatividad y de certeza bastante alto”, sostuvo.
Más allá de eso, Perera resaltó que el país requiere se requiere mayor claridad regulatoria para incentivar inversiones en infraestructura de almacenamiento.
El vocero recordó que Solgas mantiene una deuda de US$ 28 millones con el Fondo de Estabilización “por ser importadores y tener almacenamiento”, lo que desincentiva ampliar infraestructura. Aun así, adelantó que la empresa evalúa un próximo incremento en su capacidad de almacenamiento en el Callao.
¿Subirán los precios del GLP?
Respecto a un eventual aumento de precios del GLP, Perera consideró que el alza dependerá de un aspecto logístico, ante viajes más largos a Pisco o por mayor congestión en terminales que deberán enfrentar las empresas que se abastezcan.
Aunque el aumento podría darse en algunos casos, indicó que no necesariamente tendría un impacto significativo en los precios finales.
“Es un mercado hipercompetitivo. A veces esas alzas de costo las asumen las empresas, y otras veces intentan traspasarlas al mercado. Independientemente de eso, creería que no debería ser muy material esa alza”, afirmó.
El vocero de Solgas añadió que, aunque el volumen implicado es relevante, representa solo una fracción del mercado total. Actualmente el Perú mueve al año unas 2.2 millones de toneladas, de las cuales Zeta Gas solo mueve mil al día, por lo que el nivel de afectación por sobrecosto logístico no debiera ser muy grande frente al total del mercado.

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de San Martín de Porres con experiencia en radio, tv, redes sociales y medios impresos. Escribo y hablo sobre economía y finanzas desde el 2020.








