Solo durante el mes de noviembre y las dos primeras semanas de diciembre, de los 29 departamentos que vendió Aurora Grupo Inmobiliario, 12 fueron comprados al contado, mientras que el resto fueron adquiridos mediante financiamiento bancario.
Xavier Barrón de Olarte, gerente general de la firma, explica que se trata de una tendencia que ha cobrado mayor realce durante la pandemia debido a que muchas personas priorizaron la compra de su vivienda y destinaron a dicho fin el dinero que, antes del estallido del COVID-19, ya habían programado para la realización de un viaje o para la adquisición de un auto.
Según refiere, hasta antes de la pandemia, un proyecto era vendido entre 70% y 75% mediante financiamiento bancario, mientras que solo un 20% o 25% de las unidades eran adquiridas al contado, pero después del inicio de la primera fase de la reactivación económica –que autorizó el retorno a obras de los proyectos inmobiliarios– la compra al contado empezó a cobrar mayor protagonismo.
“Las ventas al contado han crecido alrededor de 15%, y hoy en día un 60% es al crédito y un 40% al contado. Es cierto que ha subido un poco, pero también depende del estado del proyecto”, afirma al precisar que dicho comportamiento se aprecia claramente con su proyecto Paseo Parque Graña, en Magdalena.
Al tratarse de un edificio que tiene un ticket más bajo y ya está listo para entregarse, el público ha respondido comprando en efectivo, añade.
Sobre lo que podría pasar con este comportamiento de compra en el largo plazo, Barrón de Olarte sostiene que aunque se trata de una tendencia estacionaria, sí se podría extender a lo largo del 2021.
“Puede que se mantenga este año y el siguiente, pero no es una cosa sostenible en el tiempo porque, en general, no se suelen comprar departamentos al contado, es algo pasajero. La gente va a recuperar su normalidad en el 2022 o 2023, y de nuevo volverán a planear viajes, a alquilar casas de playa o a comprarse un auto”, asegura.
Cierre 2020
Sobre los resultados que obtendrán este año, refiere que terminarán el 2020 superando sus proyecciones de crecimiento iniciales.
“Nos ha ido mejor de lo esperado, y una prueba de ello es que hasta noviembre nuestros números son 10% superiores a lo que proyectábamos para todo el 2020. Hasta finales de noviembre ya hemos vendido 130 unidades. El balance es buenísimo porque ha sido mucho mejor que los últimos tres años”, señala.
Para explicar esos buenos resultados Barrón de Olarte refiere que el enfocarse en el segmento A– y B+ los ha favorecido porque se trata de un subsector que no ha sido afectado por la pandemia.
“Nuestro posicionamiento dentro de Miraflores nos ha ayudado mucho y nuestro producto, que está en un rango inferior al top, no se ha visto resentido porque el público al que nos dirigimos no ha perdido sus empleos”, señala.
Más crecimiento
Y debido a que los números de Aurora están experimentando una tendencia al alza, estima que en el 2021 podrían lograr un crecimiento de entre 15% y 20%.
“Si hoy, con una contracción de 20% del sector inmobiliario lograríamos crecer entre 10% y 15%, el próximo año que se dice que nuestra economía debería tener un rebote de entre 9% y 11% y que en el sector inmobiliario habría un rebote mayor, tenemos la ilusión de crecer alrededor de 20% porque vamos a sumar más proyectos inmobiliarios. Vamos a tener un pico en el 2021, y en el 2022 quizá volvamos al 10% porque sabemos que es estacional”, indica.
Con relación a los proyectos que lanzarán para sustentar su crecimiento, Barrón de Olarte adelanta que después de Semana Santa lanzarán entre cuatro y cinco proyectos.
“Ya compramos un terreno y otros tres están casi casi en cierre. Solo la inversión en estos terrenos sumarán alrededor de US$ 15 millones y eso es una clara muestra de la confianza que tienen los inversores locales y los fondos de inversión que trabajan con nosotros, porque el mercado peruano es sólido”, refiere.
Pero, a diferencia de las propuestas que ponían a la venta antes de la pandemia, a partir de los dos últimos proyectos que lanzaron en julio (Parque Córdova y Alcanfores 1021) solo se centrarán en proyectos de entre 20 y 30 unidades que prioricen la vista a calle, los balcones y las zonas para coworking. “Son cambios que ya teníamos previstos y que han encajado con el momento actual”, anota.