(Bloomberg).- La caída del peso colombiano, que esta semana cayó a su nivel más bajo en 11 años, ayudará a reducir la brecha de cuenta corriente e impulsar el crecimiento, dijo el ministro de Finanzas, Mauricio Cárdenas.
"La tasa de cambio flexible nos ayuda a estimular las exportaciones y sustituir importaciones, por lo que se reduce el déficit de cuenta corriente", afirmó Cárdenas en una entrevista en Bogotá. "Esto es algo que deseamos profundamente".
La caída en los precios del petróleo y el carbón el año pasado llevaron a la brecha de cuenta corriente de Colombia a ampliarse al máximo desde 1997. El déficit se reducirá este año con respecto al 7% del PBI que alcanzó en el primer trimestre, agregó Cárdenas, declinando hacer un pronóstico.
La economía se ha comportado con "absoluta normalidad y estabilidad" en los últimos días en medio de la crisis de Grecia, dijo Cárdenas.
En otra entrevista en Red + Noticias TV, Cárdenas dijo que el peso más débil ayudará a la recuperación del crecimiento, llevándolo a su "velocidad crucero" de entre 4.5% y 5% por año y sostuvo que este año, la economía se expandirá un 3.5%.
El pesó cayó la semana pasada a su nivel más bajo desde junio de 2004 en tanto el petróleo, la mayor exportación del país, cayó debido a preocupaciones de que una economía global en recesión disminuirá la demanda.
Una desaceleración en China es, probablemente, mucho más significativa para Colombia que las dificultades de Grecia, debido a que disminuiría la demanda de las materias primas que la nación andina exporta, dijo Cárdenas. El Índice Compuesto de Shanghái ha perdido alrededor de un cuarto de su valor en el último mes debido a las apuestas bajistas de los operadores.
Colombia entrará en una era de "austeridad inteligente" en tanto planea su presupuesto 2016, dijo Cárdenas. Esto incluirá recortes en prácticamente todos los sectores del estado, agregó.