Exoneración de IGV a alimentos bajó precios hasta 16% en supermercados y menos de 3% en mercados

El gobierno de Pedro Castillo promulgó el 14 de abril la Ley 31452 que dispuso la exoneración del IGV -desde el 1 mayo al 31 de julio 2022- de un conjunto de alimentos para paliar al alza de precios. Entre los beneficiados están: carne de pollo (fresca, refrigerada o congelada); huevos frescos de gallina; azúcar; fideos sin cocer ni rellenas y pan.

La ley estableció que las empresas que comercialicen los bienes exonerados podrán aplicar como crédito fiscal el IGV correspondiente a las adquisiciones y/o importaciones de los principales insumos requeridos en el proceso productivo.

El 30 de abril -en tanto- se promulgó el DS 083-2022-EF que contiene las normas reglamentarias a la ley, en la que se especificó la lista de insumos para producir los bienes exonerados que generan crédito fiscal, que son:

a) Carne de pollo: pollos en pie, huevos fecundados para incubación, maíz, grasa y aceite de pescado, de soya y de maíz, y varios preparados alimenticios para aves.

b) Huevos de gallina: pollos en pie, maíz, grasas y aceite de pescado, de soya y de maíz, y diversos preparados alimenticios para las aves.

c) Azúcar: caña de azúcar.

d) Fideos sin cocer ni rellenar: Trigo y harina de trigo.

e) Pan: trigo, harina de trigo, gluten de trigo, levaduras, mejoradores de panificación y salvado moyuelos y demás residuos de molienda u otro tratamiento del trigo.

-Los efectos en los precios, ¿cumplió la meta?-

En el último reporte de inflación del Banco Central de Reserva (BCR) da cuenta que -de acuerdo con información diaria de los precios minoristas de Lima reportados por el Sistema de Abastecimiento y Precios (SISAP) del Midagri- acerca de los productos afectos a la reducción temporal del IGV, se esperaba un impacto acotado de la medida durante la primera semana de aplicación.

Asé, el precio promedio de los bienes afectos (sin incluir el pan ni las pastas) habría disminuido en aproximadamente 2.5 puntos porcentuales entre la cuarta semana de abril y la primera semana de mayo.

Durante ese mismo periodo, se estima que el precio promedio de otros bienes no afectos a la medida, como aceite, arroz y leche evaporada, no registraron reducciones.

Respecto a estos impactos iniciales de la medida, el BCR indica que se debe mencionar que, otros hechos pudieron afectar la cotización de estos productos y atenuar los efectos de la reducción temporal del IGV.

Así que para aislar estos efectos, el BCR comparó la evolución de los precios reportados en los mercados con información de los precios de los supermercados, tomando en cuenta que los primeros cuentan parcialmente con un grado de informalidad que los haría menos sensibles a modificaciones del IGV.

¿Qué descubrió? Que cuando se analiza información diaria de supermercados se observa que algunos productos pertenecientes al grupo de bienes afectados por la medida redujeron significativamente sus precios entre 14% y 16% en promedio durante la primera semana de mayo.

A continuación -el reporte del BCR- muestra el resumen de las variaciones porcentuales de precios en la primera semana de vigencia de la reducción a través de los rubros referidos. El cuadro resume el seguimiento de productos específicos diferenciados por marca, peso y la especificación con las que se venden en los supermercados.

Se trata de 15 productos de azúcar, 10 productos de huevo, 122 tipos de panes y 39 tipos de pollos.

En tanto, que el histograma siguiente muestra la heterogeneidad en las variaciones de precios. Por ejemplo, el salto más extremo es el del pan petipan de supermercados, que cayó 57%, de S/ 6.9 el 30 de abril a S/ 2.95 el primero de mayo, precio vigente hasta la segunda semana de mayo.

Sin embargo, se observa que las variaciones de precios de los productos afectados se concentraron alrededor de -14% y -16%.

La evidencia inicial -concluye el análisis del BCR- sugiere que la reducción temporal del IGV tuvo un impacto diferenciado en los precios finales según el lugar de venta de los productos afectos a la medida.

De este modo, se observa una reducción de los precios entre 14% y 16% en promedio en el caso de los supermercados, pero menores al 3% en promedio en el caso de los mercados de abasto.

Este resultado probablemente se deba -dice el BCR- a que estos últimos operan con un cierto grado de informalidad, que los hace menos sensibles a las modificaciones del IGV.

-Nota-

• Julio Velarde, presidente del BCR, dijo durante la presentación del reporte de inflación correspondiente a junio que el 70% de la categorías de productos sube más de 3%.

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