El gasto de las familias se mantiene débil y todavía no se ve un panorama claro de recuperación hacia adelante. En octubre, el Índice Big Data de Consumo (elaborado sobre la base del gasto con tarjetas de crédito y de débito y retiros de efectivo, corregido por inflación) tuvo una nueva contracción interanual, la octava consecutiva.
Pese a que se moderó ligeramente la caída el mes pasado (octubre: -7.6%), la data revela que el consumo en el Perú inició “en rojo” el último tramo de este año.
El BBVA Research, quien elabora dicho índice, explica: “Este debilitamiento del gasto de las familias se viene dando en un contexto de menor dinamismo del empleo y caída de los ingresos laborales (ajustados por inflación) del sector formal. Además, la confianza del consumidor se mantiene en terreno negativo”. Agrega que este continuo retroceso del consumo familiar responde también a las altas tasas de interés.
“El Índice Big Data de Consumo acentúo su tendencia decreciente en el tercer trimestre del año y a inicios del cuarto”, afirma BBVA Research.
En la misma línea, Luis Fernando Alegría, profesor de Pacífico Business School, comenta que el problema de fondo es que Perú tiene una inversión privada que cae prácticamente de manera estructural porque ha enfrentado dos años de confianza empresarial en terreno pesimista; esto, impacta en el empleo de calidad. “Sin inversión privada, sin nuevos negocios, sin nuevos proyectos moviéndose, no se genera más empleo y no se presiona los ingresos al alza”, anotó.
En este contexto, dice Alegría, que “no se ve espacio de recuperación ni para el cuarto trimestre de este año ni para el verano del 2024. La probabilidad de un fenómeno de El Niño fuerte es cada vez más alta y es un riesgo claro para el consumo del próxmo año”.
Digitalización. Aumenta la digitalización del gasto de consumo: se reduce el uso de efectivo y aumenta el canal online, en un contexto de mayor dinamismo de pagos por teléfonos móviles. “Aumenta la participación a 53% de las compras con tarjetas (debido al mayor uso de plataformas para pagos con teléfonos móviles), mientras disminuye la de los retiros de efectivo”, anota el BBVA Research.
Gasto con tarjeta
Considerando solo las compras que se realizan con tarjetas de crédito y débito, el índice mide seis componentes: alimentación, salud, educación, turismo, entretenimiento, hogar, transporte, moda y belleza. Salvo por educación (1.9%), “la mayoría de los componentes del Índice Big Data de Consumo se contrajeron” en octubre.
El caso del gasto con tarjeta en entretenimiento es particular, pues se contrajo 21.2% el mes pasado respecto a octubre del 2022. Pero, también se ubica 10% por debajo de los niveles previos a la pandemia. Esta situación se explica sobre todo por el menor gasto en cine, teatro y otros espectáculos.
A octubre pasado, el gasto acumulado interanual en educación (2.6%) y alimentación (1.3%) fueron los más dinámicos. Le siguieron en el acumulado entretenimiento (0.7%) y turismo (0.5%). En contraparte, está salud (-4.9%), moda y belleza (-9.1%), hogar (10.7%), entre otros.
Editora de Economía y Finanzas del diario Gestión. Licenciada en Ciencias de la Comunicación. Con 9 años de experiencia profesional en el rubro.