
A nivel nacional, las intenciones de siembra para la campaña agrícola 2025/2026 alcanzan los 2,115,094 de hectáreas, de acuerdo el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri). ¿Cuál es el panorama para la capital?
Durante una reciente conferencia a cargo de la cartera, Yosimar Poma, director de la Oficina de Información Agraria de Lima, brindó detalles.
Antes, sostuvo que el indicador clave de rendimiento agrícola para la campaña en estudio registraba una disminución de 3.95% en comparación con las últimas cinco. ¿A qué se debe?
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Barranca, líder en la participación de cultivos
Poma informó que Lima enfrenta una ligera disminución en las áreas de labranza. ¿Las razones? La ampliación urbana, los almacenes en Huaral a causa de la presencia del megapuerto de Chancay y las condiciones climáticas que provocan huaicos y lluvias.
El espacio que sí está disponible, por tanto, se divide entre Barranca, con 37.5% de participación de cultivos; Cañete, con 23.8%; Huaral, con 15.4%; Huaura, con 10.1%; y otros, con 13.3%.
En este último grupo están involucrados Huarochirí, Cajatambo, Yauyos, Oyon y Canta.
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Intención de siembra en Lima: los productos
El especialista enlistó los productos agrícolas que registran mayor intención de siembra: el maíz amarillo duro, con 30.7%; la papa, con 16.7%; el camote, con 8.7%; el maíz choclo, con 6%; el paprika, con 4.8%; la zanahoria, con 4.2%; el frijol grano seco, con 4%; la yuca, con 3.5%; y el ajo, con 3.2%.
La cuota de “otros” la integran la cebolla, el zapallo, el algodón, la cebada en grano, el trigo, el olluco, la arveja grano seco, la quinua, el tomate, la haba grano seco, el maíz amiláceo y la arveja grano verde.
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Factor clave: tipo de riego
Otra consideración durante la intervención de Poma fue el tipo de riego de los cultivos en Lima.
En ese sentido, un 3.2% de las áreas cultivadas se someten al secano; es decir, a la recepción de agua de lluvia. Esto significa que la producción puede variar según la cantidad y distribución de las precipitaciones.
No obstante, la mayor cantidad de terreno, un 96.80%, sí registra un conjunto de estructuras y componentes diseñados para suministrar agua de manera controlada.
El experto hizo hincapié en que Lima requiere de un ordenamiento productivo, de una revalorización de cultivos altoandinos “para incentivar la siembra de trigo o haba con la asistencia de los técnicos y las agencias agrarias”, un soporte de cultivos en riesgo y, sobre todo, una inversión pública focalizada.
“[Es importante] poder compartir esta información con los tomadores de decisiones. El tema agrícola es de gran preponderancia, pero aún no visualizamos el apoyo en la inversión: construir, hacer mantenimiento de canales de riego, asistencia técnica”, concluyó.