La oferta creciente de servicios ‘low cost’
Podemos definir el low cost como la oferta del mejor servicio o producto al mejor precio posible. Y si lo vemos desde la perspectiva de la empresa también trae consigo la mayor rentabilidad posible. El modelo low cost intenta mantener en todo momento el equilibrio entre precio-calidad.
Algunas personas, por desconocimiento, asocian el término con algo de baja calidad y aún desconfían de las compañías que ofrecen servicios de vuelo u otros de bajo costo. Ante este temor es oportuno señalar que el low cost es posible gracias a la optimización de los recursos. Incluso, hoy también se habla de un nuevo concepto: logical cost o costos lógicos. Es posible que las compañías low cost no trabajen con precios demasiado bajos, sino que las otras empresas ofrezcan servicios tradicionales a precios bastante más caros.
¿En qué sectores se está desarrollando con más énfasis?
Actualmente encontramos el low cost en diferentes sectores, entre los que destacan:
- Líneas aéreas: VivaAir, SkyAirlines, Ryanair, Easy Jet, JetBlue, entre otras.
- Alquiler de automóviles: Pepecar, que ofrece vehículos de dos o cuatro ruedas desde un euro por día.
- Hoteles: EasyHotel.com, Travelodge, Hoteles Accor, Ibis, etc.
- Establecimientos de moda. H&M, Mango, Zara, Primark, entre otras.
- Cafeterías: Konecta2 (Colombia), Cool Bakery (España), entre otras.
Si bien en el Perú encontramos presencia del low cost en las aerolíneas aéreas y en establecimientos de moda, no debe sorprendernos que en los próximos meses y años existan más sectores con servicios o productos de este tipo.
Justamente, los outlets, las marcas propias de empresas de gran distribución, las marcas B de empresas automotrices (Skoda de Volkswagen y Dacia de Renault) o agencias de viajes online pueden replicar este modelo. Ikea o el famoso Tano Nano, un automóvil que se vende en India por 2000 euros, son algunos ejemplos icónicos.
Ventajas del modelo low cost
- Adaptación al entorno. Reducir considerablemente los precios respecto a la media del sector brinda la posibilidad de atacar a segmentos de la población que han visto reducida su capacidad adquisitiva producto del mayor coste de vida. Se ataca a consumidores potenciales que sí quieren seguir gastando pero lo hacen con más precauciones para no salirse de su presupuesto.
- Posibilidad de crecimiento. En un contexto como el actual, el modelo low cost permite un mayor potencial de crecimiento en ventas, aunque eso no signifique necesariamente mayores beneficios.
Desventajas del modelo
- Control imprescindible de los costos. Para tener productos o servicios que tengan un precio competitivo en el mercado es necesario tener muy cuidado con los costos. Reducir el precio hasta en un 30% respecto a la media del mercado implica un esfuerzo muy grande y tiene que ser sostenido en el tiempo.
- Riesgo de empeoramiento de la calidad. De la mano con el punto anterior, hay que tener mucho cuidado con el cuidado de la calidad de los productos o servicios finales. Si por tratar de ajustar los márgenes se va a reducir calidad se cometerá un gran error.
Finalmente es importante señalar que las low cost no compiten necesariamente con empresas de su mismo rubro sino con competidores sustitutos. Por ejemplo, una compañía aérea low cost no compite con una compañía aérea tradicional, lo hace con las compañías de transporte terrestre, y en otros mercados con el transporte ferroviario. Hay un público creciente que valora su modelo y está dispuesto a hacer parte del trabajo de la compañía para beneficiarse con un mejor precio.