ADAPTARSE O FALLAR: VUCA Y LA GESTIÓN DE RIESGOS
En el mundo, así como en el Perú, las empresas operan en un entorno VUCA, acrónimo en inglés que representa volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad. Esta realidad exige que las organizaciones, especialmente mediante sus comités de auditoría, desarrollen mecanismos ágiles y efectivos para identificar, evaluar y responder a riesgos que evolucionan con rapidez y frecuencia.
Este escenario impacta tanto a compañías pequeñas como a grandes corporaciones, y exige que la gestión de riesgos sea dinámica, prospectiva y capaz de anticipar escenarios inciertos:
1. Volatilidad: Si bien el tipo de cambio es estable, la fuerte dependencia de las exportaciones de minerales expone al país a variaciones en el precio del cobre y otros recursos, afectando directamente las finanzas corporativas y el desempeño económico.
2. Incertidumbre: Los cambios políticos y las frecuentes regulaciones afectan la toma de decisiones estratégicas y la planificación a largo plazo.
3. Complejidad: Las cadenas de suministro locales y regionales están influenciadas por factores globales, además de la adopción acelerada de tecnologías disruptivas, lo que genera interdependencias y desafíos crecientes para las organizaciones.
4. Ambigüedad: La regulación en temas como inteligencia artificial, protección de datos y responsabilidad social corporativa aún carece de áreas claras, lo que dificulta una gestión eficaz y un cumplimiento adecuado.
En términos de gestión de riesgos, las empresas encuentran múltiples retos que derivan de operar bajo condiciones VUCA. Estos riesgos, como los que se mencionan a continuación, exigen que las organizaciones cuenten con sistemas robustos que les permitan ser resilientes y capaces de adaptarse al cambio:
1. Retraso en inversiones: La incertidumbre político-regulatoria induce a postergar proyectos de expansión o innovación, frenando el crecimiento.
2. Asignación ineficiente de recursos: La dificultad de predecir riesgos lleva a invertir en exceso ante amenazas improbables o a descuidar áreas críticas.
3. Debilidades en controles internos: Cambios organizacionales y digitales pueden producir brechas que aumentan riesgos de incumplimiento o fraude.
4. Incertidumbre en proyecciones financieras: La volatilidad de precios de commodities afecta la precisión de estimaciones contables y presupuestarias.
5. Riesgos reputacionales: La gestión adecuada de temas sociales, ambientales y éticos, especialmente relevantes en Perú, es esencial para preservar la imagen corporativa.
6. Parálisis ante decisiones: El temor a equivocarse en contextos ambiguos puede ralentizar las acciones necesarias.
El rol del comité de auditoría
Al desempeñar funciones clave en la supervisión de riesgos financieros, operativos y de cumplimiento, el comité de auditoría contribuye a que la empresa no solo cumpla con regulaciones, sino que sea capaz de adaptarse y desarrollarse en un entorno complejo. Para ello, debe conocer profundamente el panorama local y global, evaluar y adecuar su marco Enterprise Risk Management (ERM, por sus siglas en inglés), y prepararse ante eventos disruptivos, asegurando que existan planes efectivos para mitigar impactos sobre riesgos naturales, sociales, ciberataques y sanciones regulatorias.
En ese sentido, para que los comités de auditoría enfrenten con éxito el mundo VUCA, se recomienda: capacitación continua específica, trabajo interdisciplinario, revisión dinámica del ERM, fomento de una cultura proactiva, así como una exigencia de transparencia que promueva informes claros y detallados sobre los riesgos y las medidas ejecutadas, fortaleciendo la confianza y la gobernanza.
Finalmente, como se aprecia, la realidad empresarial peruana refleja con fuerza las características del entorno VUCA: volatilidad en precios de commodities, incertidumbre política, complejidad regulatoria y ambigüedad en normas emergentes. Frente a esto, el comité de auditoría se consolida como un actor clave para fortalecer la gestión de riesgos de manera anticipatoria, integral y alineada con la estrategia. Adoptar un enfoque dinámico en el Enterprise Risk Management, con énfasis en riesgos interrelacionados y en la preparación ante eventos disruptivos, permite a las organizaciones no solo mitigar amenazas, sino también aprovechar oportunidades, asegurando su sostenibilidad, transparencia y reputación en el mercado.
“El éxito en el mundo empresarial se basa en la capacidad de cambiar antes que tus competidores.” (Jack Welch).
Fomentemos organizaciones que fortalezcan sus estructuras y construyan futuros sostenibles.